Habrá Clásico
(ANSA) - TURIN, 2 FEB - Un gol del brasileño Gleison Bremer le dio el triunfo a Juventus por 1-0 frente a Lazio y el último pasaje a las semifinales de la Copa Italia, instancia en la que reeditará el "Clásico" frente a Inter que animaron en la final de la pasada edición.
Bremer marcó la única diferencia en el partido cuando agonizaba el primer capítulo y le permitió al equipo de Massimiliano Allegri reencontrarse con el triunfo ante una Lazio que llegaba entonada, pero que volvió a tropezar en una instancia decisiva.
La "Vecchia Signora", que con 14 títulos es el equipo más laureado del torneo, tendrá así la posibilidad de una revancha en abril frente a un Inter que la destronó al derrotarla en la definición de la anterior edición.
En una temporada complicada en la que sufrió la quita de 15 puntos en el campeonato a modo de sanción por el caso de las plusvalías "infladas", Juventus se tomó revancha de la derrota que sufrió el pasado fin de semana frente al ascendido Monza en el torneo y también como local.
Hoy, frente a unos 22 mil espectadores, el equipo de Allegri se reivindicó ante su público ante un rival de cuidado como Lazio que llegaba en racha en busca de avanzar en una Copa Italia que conquistó por séptima y última vez en 2019.
El regreso del recuperado capitán y goleador Ciro Immobile, reemplazado al final del primer tiempo, no le bastó a los dirigidos por Maurizio Sarri para extender su buen momento y fue el cabezazo de Bremer el que hizo festejar a los fanáticos rivales.
En una definición a duelo único (las semifinales serán con partidos de ida y vuelta), Juventus pegó primero y cantó victoria en el momento en que más lo necesitaba, pues la sanción que sufrió en el campeonato parece haberla marginado de toda posibilidad de pelear por el "scudetto".
Más aún cuando sus actuaciones no resultan por demás convincentes, aunque hoy al menos se sacó la espina y ganó después de tres partidos sin halagos, aunque también festejó la vuelta al ruedo del artillero serbio Dusan Vlahovic, quien formó dupla de ataque desde el inicio con Federico Chiesa.
Esa fue la principal novedad en el plantel de Allegri, que apostó por sus mejores once disponibles, incluidos los brasileños Danilo y Alex Sandro y el colombiano Juan Cuadrado, otro "soldado" recuperado para la causa blanquinegra.
Nicoló Fagioli, reemplazado a los 64' por el también juvenil Fabio Miretti, también fue de la partida, en tanto que el argentino Angel Di María saltó al ruedo a los 78' por Chiesa y el también campeón mundial en Qatar, Leandro Paredes, observó el partido desde el banco junto a su compatriota Matías Soulé.
Mattia Perin custodió la valla del local que intentaron vulnerar Immobile, el brasileño Felipe Anderson y Mattia Zaccagni, los elegidos por Sarri para conformar el tridente ofensivo de una Lazio en la que ingresó a los 59' el serbio Sergej Milinkovic-Savic (por el uruguayo Matías Vecino) y Pedro por Immobile en el arranque del complemento.
El primer tiempo tardó un cuarto de hora en calentar motores y fue con una llegada por bando, siendo una mala salida de Fagioli la que inició un contragolpe que Zaccagni no supo aprovechar y un remate rasante del serbio Filip Kostic en la réplica que alcanzó a desviar el tiro de esquina el arquero portugués Luís Maximiano la respuesta del dueño de casa.
Kostic fue uno de los más activos en Juventus, mientras Vlahovic y Chiesa intentaban buscarse sin encontrarse, como tampoco encontró el arco el francés Adrien Rabiot, al conectar un cabezazo desviado a los 28' en el área libre de marcas.
No fallaría en cambio Bremer, que sí supo capitalizar una salida en falso de Maximiano para decretar el 1-0 que terminaría siendo definitivo aún cuando quedaba por jugarse un tiempo completo.
El ingreso del español Pedro por Immobile, obligó a Felipe Anderson a posicionarse como centro delantero, aunque Lazio llegaría por primera vez al arco rival en el complemento con un tiro libre de Danilo Cataldi que no logró inquietar a Perin, hoy reemplazante del polaco Wojciech Szczesny.
El ingreso de Milinkovic-Savic intentó darle más profundidad al ataque de Lazio, mientras que Allegri respondió mandando a la cancha a Miretti y a Moise Kean, quien de inmediato probó a Maximiano con un remate demasiado centrado.
Lazio no lograba generar peligro a pesar de realizar otros tres cambios ante una Juventus que supo manejar los ritmos y defender la ventaja, aunque a Allegri no pareció conformarlo porque dejó la cancha furioso tras el pitazo final de Fabio Maresca rumbo a los vestuarios.
En el campo permanecieron sus dirigidos, que celebraron con el público el pasaje a semifinales y la oportunidad de revancha frente a un Inter que había atrapado el primer boleto derrotando también por la mínima y de local al Atalanta.
Lazio volvió a quedar en deuda y se despidió del torneo junto con Roma, su clásico rival que cayó 2-1 en el Olímpico frente a Cremonese (último en el campeonato que venía de eliminar al Napoli, líder de la Serie A), rival en semifinales de Fiorentina, que se impuso por 2-1 también, pero de local ante Torino. (ANSA).
