Alberto Ginulfi, recordado ex arquero de la Roma que supo atajarle un penal al astro brasileño Pelé y se codeó con el crack argentino Diego Maradona en sus tiempos en Napoli, falleció a los 82 años de edad.
La noticia fue dada a conocer por sus familiares, quienes explicaron que el deceso se produjo en la capital italiana, en la que había nacido, como consecuencia de problemas físicos vinculados con su edad avanzada.
Ginulfi debutó profesionalmente con la Roma, con la que conquistó dos Copas Italia (1963-64 y 1968-69) y la Copa Anglo-italiana en 1971-72, y en la que totalizó 157 partidos entre 1962 y 1975.
Fue con la casaca "giallorossa" que pasó a la historia en un amistoso disputado en el Estadio Olímpico el 3 de marzo de 1972 frente al Santos de Pelé, a quien le atajó un penal y quien lo felicitó al final del partido.
"De aquel día me acuerdo por sobre todo del reconocimiento de Pelé tras el partido. Me dejó su camiseta y me invitó a la embajada brasileña en Piazza Navona, al día siguiente", rememoró Ginulfi en diálogo con ANSA tras el deceso del tricampeón mundial brasileño, el 29 de diciembre de 2022 también a los 82 años.
"Pelé era un mito para mí y su casaca fue una de las joyas más preciadas. Era de esas de verdad, no como las de ahora. Tenía mangas largas, el escudo bordado y los números cosidos con hilo", recordó también.
Ginulfi, que jamás se desprendería de esa camiseta a pesar de las ofertas recibidas para venderla, ya había enfrentado previamente a "O Rei" un par de años antes en otro amistoso con Santos en el estadio Flaminio.
El italiano ingresó en el complemento de aquel partido (aún no era titular) y tuvo algunas atajadas destacadas que llamaron la atención del astro brasileño, quien le sugirió a un apoderado que lo contratase, "algo que resultó más gratificante aún que el penal que le atajé después", decía Ginulfi.
A lo largo de su carrera, además, atajó en Hellas Verona entre 1975 y 1976, en Fiorentina entre 1976 y 1977 y en Cremonese entre 1977 y 1978, tras lo cual "colgó los guantes".
Entre sus rivales se destacaron figuras de la talla de Sandro Mazzola, Gigi Riva y el ítalo-argentino Enrique Omar Sívori.
Tras su retiro, Ginulfi fue entrenador de arqueros y llegó a trabajar en el Napoli de Maradona que entrenaba Ottavio Bianchi y que logró el primer "scudetto" en la historia del club en 1986-87 y también en el segundo, que llegaría en 1989-90 con Alberto Bigon como DT.
"Fue el más grande de todos", decía sobre el campeón mundial argentino al recordar que esa misma frase "la escribí en una foto suya que tenía una dedicatoria" y que guardó junto con una casaca de Maradona de aquellos años dorado al lado de la de Pelé, su otro tesoro.
De Maradona, fallecido el 25 de noviembre de 2020, Ginulfi recordaba también que durante los entrenamientos en Napoli se divertía con él ejecutando tiros libres.
Hoy, seguramente en Nápoles y en Napoli (flamante campeón del fútbol italiano después de 33 años de espera), a alguno se le escapará una lágrima al conocer la noticia de su deceso, tal como sucedió con fanáticos de la Roma, del Verona y de Fiorentina, que expresaron su dolor en las redes sociales por la muerte del arquero "giallorosso" que -recordaron- fue "el más romano y romanista de la historia".
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