La lista de "violaciones graves" de la dignidad humana contenida en la Declaración del Dicasterio para la Doctrina de la Fe "Dignitas Infinita" se completa con la "violencia digital", y cita las "nuevas formas de violencia que se difunden a través de las redes sociales, por ejemplo "por ejemplo, el ciberacoso" y la "difusión de la pornografía y la explotación de personas con fines sexuales o mediante juegos de azar" en la web.
"El progreso de las tecnologías digitales, que ofrecen también muchas posibilidades para promover la dignidad humana -se explica en el documento-, tiende cada vez más a la creación de un mundo en el que crecen la explotación, la exclusión y la violencia, que pueden acabar dañando la dignidad de la persona humana".
"Piensen en lo fácil que es, por estos medios, poner en peligro la buena reputación de cualquiera con noticias falsas y calumnias", advierte.
Sobre este punto, el Papa Francisco subraya que "no es saludable confundir la comunicación con el simple contacto virtual". De hecho, "el entorno digital es también un territorio de soledad, manipulación, explotación y violencia, hasta el caso extremo de la dark web. Los medios digitales pueden exponernos al riesgo de adicción, aislamiento y pérdida progresiva de contacto con la realidad concreta, dificultando el desarrollo de auténticas relaciones interpersonales".
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