En la penúltima cumbre de los 27 países antes de las elecciones europeas, al margen de la mesa principal, se comenzará a hablar de nombramientos para los altos cargos comunitarios y eso significa un riesgo de volver aún más tensa una reunión ya delicada y centrada casi por completo en las dos guerras, de Ucrania y de Medio Oriente.
Y la llegada de Ursula von der Leyen como candidata elegida para el máximo cargo de la fuerza PPE no calmó el ambiente, con liberales y socialistas que aumentan la presión sobre la presidenta de la Comisión y sobre su estrategia de diálogo con la derecha.
"Siguiendo a Giorgia Meloni no llegará muy lejos", es el claro mensaje enviado por los liberales de Renew en el lanzamiento de la campaña para las elecciones europeas.
Rara vez Bruselas ha estado tan repleta de líderes como esta semana.
A los jefes de Estado y de Gobierno que acudieron al Consejo Europeo y a la cumbre sobre energía nuclear se unieron numerosos líderes de partidos, empezando por Elly Schlein.
Y la secretaria del Partido Democrático (PD) inmediatamente cruzó a Von der Leyen: "Sufrí cuando la vi volar con Meloni y los demás a Egipto", comentó.
Por la noche, Paolo Gentiloni, con un talante más electoral y menos eurotécnico, también habló en el Foro Europa organizado por los demócratas.
"Debemos decir con mucha fuerza a todos nuestros amigos de la mayoría proeuropea que dejar la puerta abierta a quienes quieren destruir la UE es un error que no permitiremos", subrayó el Comisario de Asuntos Económicos, alegando un "papel de "liderazgo" de los socialistas en la futura mayoría.
A pocos kilómetros, los liberales de Renew lanzaron la campaña para las elecciones europeas y sus tres principales candidatos, la macroniana Valerie Hayer, el secretario general del PDE Sandro Gozi y la alemana Marie-Agnes Strack-Zimmermann.
El cierre a la ultraderecha también es máximo en este caso: "Le diría a Ursula von der Leyen que es cierto que todos los caminos conducen a Roma, pero el camino a Roma no la llevará muy lejos", advirtió Gozi.
Von der Leyen, comentaron los otros dos líderes de la campaña, se presenta por sí misma, "no es una candidata real".
La cuestión es que los líderes de los 27 eligen ante todo al presidente de la Comisión y, en el Consejo Europeo el apoyo a Von der Leyen hasta ahora parece sólido.
"Veo que los países ya se están contando", bromeó un diplomático europeo.
El recuento no es fácil: los intereses nacionales deben cruzarse con los del partido que representa al premier.
Si el PPE, los socialistas y los liberales resisten la onda expansiva de la derecha, las posibilidades de la ex ministra de Defensa podrían disminuir significativamente.
En ese punto, los juegos se reabrirían con varios caminos alternativos, desde el que sigue dentro de los populares hasta un técnico al estilo Mario Draghi.
Con un apéndice: el paquete, al menos entre los dirigentes, debe cerrarse en junio. Es decir, antes de que Viktor Orban asuma el cargo de presidente rotatorio de la UE.
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