Los ministros de Economía de la Unión Europea alcanzaron este miércoles un acuerdo sobre el nuevo Pacto de Estabilidad, que flexibiliza algunas de las reglas preestablecidas.
El Consejo para Asuntos Económicos y Financieros de la Unión Europea (Ecofin) dio luz verde a la reforma del Pacto de Estabilidad, que prevé nuevas normas "realistas, equilibradas y adecuadas a los desafíos presentes y futuros", según declaró la actual presidencia rotatoria de la Unión Europea, España.
"El acuerdo sobre nuevas reglas fiscales es una noticia importante y positiva. Esto proporcionará seguridad a los mercados financieros y fortalecerá la confianza en las economías europeas", afirmó la viceprimera ministra española y ministra de Economía, Nadia Calviño.
La reforma busca modernizar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, una especie de "corsé presupuestario" creado a finales de los años 1990 y que limita el déficit a 3% del PIB y la deuda a 60% en cada Estado miembro.
El pacto fue suspendido en 2020 para evitar una caída de la actividad económica tras la pandemia de Covid-19. La suspensión se mantuvo por la invasión rusa de Ucrania, pero el pacto deberá ser reactivado el 1 de enero.
El nuevo texto, que no elimina estos límites, adapta las reglas según la situación de cada país. De este modo, permitirá ajustes menos brutales para los países en dificultad. En caso de déficit excesivo, los ajustes reclamados a un país serán más flexibles y realistas.
En el nuevo Pacto de Estabilidad, "hay cosas positivas y otras menos. Sin embargo, Italia ha conseguido mucho y, sobre todo, lo que hemos firmado es un acuerdo sostenible para nuestro país, encaminado, por un lado, a una reducción realista y una reducción gradual de la deuda, mientras, por otra parte, se analizan las inversiones", declaró el ministro italiano de Economía, Giancarlo Giorgetti.
El Ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, también se mostró satisfecho: "Las nuevas normas presupuestarias para los países miembros de la UE son al mismo tiempo más realistas y eficaces. Se ha reforzado la política de estabilidad".
"El acuerdo es una buena noticia para la economía europea, pero el viaje aún no ha terminado. En enero tendremos que pasar a la siguiente fase y confío en que se mantendrá el mismo espíritu constructivo y el mismo compromiso que nos llevaron a un resultado exitoso hoy, nos guiará hacia una conclusión positiva de los últimos pasos", afirmó el Comisario de Asuntos Económicos de la UE, Paolo Gentiloni.
El acuerdo se logró tras un acercamiento el martes entre Francia y Alemania, defensor de limitaciones para lograr una reducción efectiva de la deuda en toda la UE.
Los países endeudados del sur de Europa insistieron en la necesidad de integrar flexibilidades adicionales al pacto, para proteger la inversión necesaria a la transición verde y los gastos militares vinculados a la guerra de Ucrania.
La ausencia de un acuerdo sobre estas nuevas reglas antes del 2024 habría afectado la credibilidad de la UE ante los mercados financieros. El texto aún debe ser negociado con el Parlamento Europeo.
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