En Ucrania, Moscú no quiere territorios sino garantías para su propia seguridad, pero la OTAN, el "eje del Mal" y quiere continuar la guerra para desgastar a Rusia, afirmó en una entrevista con ANSA la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Moscú, María Zakharova.
En cuanto a Italia, la portavoz habla de "lazos bilaterales hoy destruidos", mientras "prosigue el diálogo con el Vaticano" sobre la iniciativa de paz de la Santa Sede.
Cuando se le pregunta cuánto tiempo más podrá resistir Rusia ante el colapso del rublo, el aumento de la inflación y los drones que pululan sobre Moscú, Zakharova responde con una confianza extravagante: "Me haces reír. Estados Unidos pensó que no podríamos durar un mes en 2022", después de que nos impusieron, en sus propias palabras, "sanciones infernales".
"Y en lugar de eso vivimos, nos desarrollamos, avanzamos.
Rusia fue parte de las cinco principales economías del mundo según los resultados de 2022. En el segundo trimestre de este año, el PIB creció un 4,9% respecto al mismo periodo del año anterior. Esta realidad horrorizó a todo el eje del mal de la OTAN (y ustedes son el eje del mal, por supuesto). La operación depende en gran medida de qué tan rápido Kiev y Occidente se den cuenta de que no toleraremos la existencia de un Estado abiertamente antirruso en nuestras fronteras, cualesquiera que sean esas fronteras", sostuvo Zakharova.
Recientemente, un alto funcionario de la OTAN, Stian Jenssen, especuló que Ucrania podría ceder sus territorios a Rusia a cambio de su ingreso a la OTAN. "Es sólo un engaño para acostumbrar poco a poco a Kiev a la idea de que la OTAN no irá a la guerra por Ucrania. Occidente -dice convencida la portavoz del ministro Serghei Lavrov- quiere prolongar el conflicto para librar una guerra de desgaste con Rusia en manos del régimen de Kiev".
"Y las pérdidas de los ucranianos no tienen importancia para la OTAN. Además, no está del todo claro de qué concesiones territoriales estamos hablando. Crimea y Sebastopol, las repúblicas de Donetsk y Lugansk, las regiones de Zaporiyia y Jerson pasaron a formar parte de la Federación de Rusia en total conformidad con el derecho internacional en el ámbito del derecho a la autodeterminación", acotó.
"Los habitantes de estos territorios -prosiguió la vocera- votaron en referendos a favor de la independencia y la adhesión a Rusia. Nuestro país es una realidad objetiva, nuestras exigencias para resolver la crisis de seguridad europea provocada por Washington y Bruselas son conocidas por todos, están contenidas en las propuestas que hicimos a Estados Unidos y la OTAN en diciembre de 2021", amplió terminante.
"Estados Unidos y sus aliados deben comprender finalmente que el objetivo de la operación militar especial no es apoderarse del territorio ucraniano sino -subrayó Zakharova- obtener su desnazificación y desmilitarización y la garantía del estatus de país no alineado".
Durante su visita a Moscú, ni el Presidente Putin ni el Ministro Lavrov recibieron al cardenal Matteo Zuppi. Rusia no cree en la iniciativa de paz del Vaticano?, pregunta ANSA. "Creo que su pregunta no está formulada del todo correctamente. Las relaciones entre Moscú y el Vaticano, a diferencia de la mayoría de los demás países europeos, todavía se caracterizan por un enfoque constructivo y de respeto mutuo. Rusia aprecia mucho la línea equilibrada del Vaticano sobre el conflicto en Ucrania y los esfuerzos de la Santa Sede y del papa Francisco personalmente para buscar una solución pacífica, que desgraciadamente son abiertamente rechazados por el régimen de Kiev", respondió.
"Moscú sigue abierta a contactos con todos los países que quieran contribuir al restablecimiento de la paz. Por este motivo, el cardenal Zuppi fue recibido en Moscú el 27 de junio.
De hecho, las agendas muy ocupadas del presidente Putin y del ministro de Asuntos Exteriores Lavrov les impidieron reunirse con el cardenal, pero hubo dos conversaciones con el asistente del presidente, Yuri Ushakov, así como reuniones con la delegada del presidente para los derechos del niño, María Lvova-Belova, y con el Patriarca de Moscú y de toda Rusia, Kirill. Me gustaría subrayar que el diálogo con el Vaticano continúa", remarcó la portavoz de la diplomacia rusa.
Llegará el día en que Rusia e Italia vuelvan a ser amigas como lo fueron en el pasado?, planteó ANSA. "Desafortunadamente -respondió Zakharova- todo hace pensar que la profunda crisis actual en las relaciones bilaterales durará mucho tiempo.
Navegando disciplinadamente siguiendo a los Estados Unidos, Italia ha elegido el camino del desmantelamiento selectivo del complejo de décadas de antigüedad de la cooperación italiano-rusa en diversos sectores y suministra a Ucrania armas y equipos militares cada vez más pesados ;;y letales, utilizados también para ataques en territorio ruso", replicó Zakharova.
"Roma ha apoyado plenamente la guerra híbrida de Occidente que pretende debilitar a Rusia. Al mismo tiempo, tenemos muchos buenos vínculos con Italia y su maravillosa gente que, como bien sabemos, a pesar de los ejercicios rusófobos de todos los principales medios de comunicación pagados, mantiene una profunda simpatía e interés en Rusia, su cultura y su gente.
Creo que tarde o temprano las razones económicas, la cercanía cultural e histórica de los dos pueblos, las necesidades objetivas del desarrollo global llevarán a los dirigentes italianos a comprender la necesidad de restablecer los lazos bilaterales ahora destruidos", completó la vocera.
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