Ninguna víctima, algunos heridos leves, muchos rescates.
Un crucero, fondeado en el puerto de Palma, chocó violentamente con un petrolero, pero sin consecuencias.
Los daños en la zona, por el contrario, son enormes: miles de árboles arrancados de raíz, cornisas derrumbadas y muchas personas siguen sin electricidad.
La mañana de este lunes el tráfico aéreo volvió a la normalidad, pero todavía hay problemas graves, teniendo en cuenta que la tormenta azotó justo en los días del gran regreso de miles de turistas al finalizar las vacaciones. Muchos de ellos se vieron obligados a dormir en el suelo del aeropuerto de Palma, sin saber todavía cuándo poder volver a casa.
"No sabemos cuándo podremos salir de la isla: pasamos una noche en tierra, esperemos que alguien nos ayude", dijo Davide Scanavino, uno de los italianos cuyo vuelo desde Palma fue cancelado por el mal tiempo.
"Los aviones han vuelto a volar, pero obviamente están todos llenos y no están poniendo nuevos. Somos siete: 4 ya tenemos asientos para el regreso, pero tres todavía no tienen idea de cómo hacerlo y quién sabe cuándo podremos volver a Italia, alguien dice dentro de una semana. Ryanair no nos dio ningún voucher, nos dijeron que fuéramos al hotel y luego nos reembolsarían".
La Farnesina anunció que, a través del cónsul en Barcelona, ;;está prestando asistencia a los centenares de compatriotas que siguen varados.
"El consulado general está en contacto con la compañía aérea afectada por los problemas para facilitar la inserción oportuna de sus compatriotas en los primeros vuelos disponibles, mientras que algunos ya consiguieron salir de Palma de Mallorca", explicó el ministerio de Asuntos Exteriores.
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