Visita relativamente sorpresa del príncipe Guillermo, heredero del trono británico, y su consorte Catalina (Kate) entre la multitud que continúa hoy las celebraciones de coronación del rey Carlos III y la reina Camila en una de las 67.000 fiestas callejeras populares organizadas en el marco de la jornada del considerado Almuerzo de Coronación en todo el Reino Unido y en algunos países de la Commonwealth.
    Los príncipes de Gales aparecieron entre la gente -en su mayoría voluntarios de organizaciones benéficas patrocinadas por la monarquía y con quienes, entre otros, se sacaron fotografías- reunidas en la vegetación que recorre la Long Walk: la calle que conduce al Castillo de Windsor, en las afueras de Londres, donde por la noche está previsto el concierto de celebración de la coronación con la participación del tenor italiano Andrea Bocelli y un parterre de estrellas internacionales, y se esperan más de 20.000 personas.
    Durante la improvisación hubo intercambio de bromas, sonrisas y regalos, para sellar el agradecimiento dirigido por William y Kate -elegantes pero con atuendo informal- a los fans reales.
    En el corazón de la capital, sin embargo, una de las fiestas está en curso también en Downing Street, entre festones y banderas, ofrecida frente a la puerta del número 10 por el primer ministro, Rishi Sunak ante más de 100 personas, entre voluntarios y refugiados ucranianos acogidos en la isla tras el estallido de la guerra con Rusia.
   

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