La primera ministra Giorgia Meloni se encuentra este sábado en Trípoli acompañada de los ministros de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, y del Interior, Matteo Piantedosi, "para una misión del gobierno italiano en el país norafricano".
Así lo anunció Palazzo Chigi, sede del gobierno de Italia, que explicó que "con motivo de la visita, Meloni tendrá una serie de reuniones institucionales con las autoridades, en particular con el presidente del Consejo Presidencial del Estado de Libia, Mohammed Yunis Ahmed Al-Menfi , y con el Primer Ministro del Gobierno de Unidad Nacional Libia, Abdel Hamid al-Dabaiba".
"Habrá otra reunión con el sector económico y el de petróleo y gas de ambas partes y la firma de dos acuerdos", dijo a ANSA por teléfono el portavoz del ejecutivo libio, Mohamed Hamuda.
De los acuerdos, uno se refiere a "inversiones y exploración" en gas y "uno a la relación con la Guardia Costera", ha confirmado Hamuda, en referencia a "una rueda de prensa al final de las reuniones de la que tendremos más información".
Una televisora libia, Libia al-Ahrar, mostró los honores militares rendidos a Meloni en vivo en Facebook acompañado por Dbeibah dentro de un edificio.
El jefe de la agencia gubernamental que controla las ONG en Libia informó que hay expectativa en el país por saber si la visita de hoy a Trípoli de la premier italiana "contribuirá a que la política italiana regrese a tener un papel activo" en Libia. , tras el "declive" que dejó espacio a otros países.
En particular, "el expediente migratorio es un instrumento de presión en manos de otros países que limita los intereses italianos y libios", afirmó Ramadan Maiteeg, director de la "Comisión de la Sociedad Civil" (CSS) en declaraciones a ANSA.
De momento, la política italiana "todavía está lejos de la posición que merece como primer socio económico de este país rico en recursos" como el gas y el petróleo y "puerta de entrada al continente africano", ha sostenido Maiteeg, al frente de una institución afiliada al Consejo Presidencial de Libia.
El exponente institucional de la sociedad civil expresó la esperanza de que "los políticos italianos no se coloquen en una posición equivocada en la lucha por el poder en Libia" o "incluso pierdan su neutralidad" hacia las distintas facciones.
"El fracaso del Estado libio no solo inundará Italia de migrantes, sino también de terrorismo, drogas, contrabando y crimen organizado", advirtió el exdirector de relaciones públicas y relaciones con los medios de la Municipalidad de Misrata, la ciudad donde tradicionalmente se concentran los más poderosas milicias libias.
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