Las imágenes satelitales de este centro minero en el oblast de Donetsk, tomadas por Maxar Technologies, revelan edificios completamente destruidos y cráteres de cohetes en un paisaje apocalíptico. El gobernador ucraniano de la región, Pavlo Kyrylenko, informó que de los 10.500 habitantes originales, solo quedan 559, incluidos 15 niños, pero es imposible evacuarlos debido a los enfrentamientos.
Desde el punto de vista militar, la situación sigue siendo incierta, tras las declaraciones del jefe de la milicia rusa Wagner, Yevgeny Prigozhin, quine dijo que sus hombres se habrían apoderado de la localidad. El Kremlin lo ha negado y hoy el portavoz, Dmitry Peskov, se ha limitado a hablar de los esfuerzos "heroicos" de las tropas de Moscú, advirtiendo que, sin embargo, "es demasiado pronto para detenerse y frotarse las manos".
Las milicias de la República de Donetsk, anexionada el pasado septiembre por Rusia, aseguran que en el centro de Soledar solo quedan algunos "focos de resistencia" de las fuerzas de Kiev.
Pero un conocido bloguero militar ucraniano prorruso, Yuri Poldolyaka, cuenta una historia diferente. Según él, los ucranianos están trayendo refuerzos desde Kramatorsk, al oeste de Soledar, y desde Lyman, al norte. Mientras estuvieron en la ciudad, había soldados de Kiev que se negaron a rendirse escondiéndose en las minas de sal. El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, al presidir una reunión de líderes militares, aseguró que las unidades desplegadas para proteger Soledar y la cercana Bakhmut "recibirán municiones y todo lo necesario de manera oportuna e ininterrumpida".
Peskov reiteró que la conquista de todo el territorio de la región de Donetsk, así como el de la cercana Lugansk también anexada a Rusia, siguen estando entre los principales objetivos de la operación militar de Moscú. Y según el estado mayor ucraniano, después del Donbas, las fuerzas rusas podrían intentar llevar su ofensiva más al oeste, en la región de Zaporiyia.
La reestructuración del liderazgo militar demostró que Moscú se está preparando para un conflicto prolongado, con el nombramiento del Jefe de Estado Mayor Valery Gerasimov como comandante no solo de las operaciones de campo, sino también de las actividades para garantizar el suministro de armas y la logística a las tropas.
El ministerio de Defensa ruso, por cierto, ha recibido otro lote de tanques T-90M Proryv de la empresa Uralvagonzavod del grupo Rostec. Mientras que el presidente de la Comisión de Defensa de la Duma, Andrey Kartapolov, dijo que este año podría lanzarse un proyecto para elevar la edad máxima de reclutamiento en las fuerzas armadas de 27 a 30 años.
Mientras tanto, a cientos de kilómetros al oeste de Soledar, en la frontera norte de Ucrania con Bielorrusia, persisten las tensiones por un posible ataque de tropas de Moscú y Minsk, que entrenan una fuerza conjunta desde octubre pasado. Motivo de alarma para Kiev es la visita realizada hoy a estos militares por el general Oleg Salyukov, comandante de las fuerzas terrestres rusas, designado ayer entre los adjuntos del comandante Gerasimov para la campaña de Ucrania.
Zelensky habló de una posible invasión desde el norte hace unos días durante una visita a Lviv. Pero según algunos observadores, podría ser un movimiento táctico de Moscú para obligar a los ucranianos a mantener ocupadas a muchas de sus tropas en la frontera norte, desviándolas del frente oriental.
En el frente diplomático, una fuente del gobierno turco anunció que el presidente Recep Tayyip Erdogan tiene programadas conversaciones telefónicas para el viernes y el sábado con Putin y Zelensky sobre la posible apertura de un "corredor humanitario" hacia Ucrania.
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