El juez, Pablo Llarena, ordenó en una providencia mantener las órdenes de detención para Puigdemont, huido de la justicia española desde 2017 en Bélgica, y otros tres dirigentes y dio a las partes un plazo de cinco días para que se pronuncien sobre la aplicación de la norma, que fue publicada hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE) tras ser aprobada el pasado 30 de mayo.
Por su parte, el abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye, pidió "calma", mostró su "confianza" en los jueces, y recordó que el exmandatario catalán siempre dijo que estará en España para el pleno de investidura del nuevo presidente en el parlamento de Cataluña, previsto para finales de junio, y que "nunca ha tenido miedo al riesgo".
Puigdemont reivindica su derecho a presentarse para ser investido presidente tras obtener la segunda plaza en las elecciones regionales del pasado 12 de mayo, posibilidad remota, ya que depende de los socialistas.
Los comicios los ganó el socialista Salvador Illa, quien para ser investido necesita ser apoyado por el independentista Esquerra Republicana de Catalunya (ERC).
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