Un informe de los servicios de inteligencia italianos señala que Rusia se prepara para una guerra "a largo plazo" en Ucrania, pero destaca que es "improbable" que el régimen de Vladimir Putin recurra al uso de armas nucleares.
"Para los rusos, una pausa operativa es fundamental para recuperarse y prepararse para una guerra a largo plazo. Moscú está tratando de aprovechar este período de relativo estancamiento para reiniciar las actividades del productivo complejo militar ruso, que comienza a sentir la presión y el impacto de las sanciones occidentales".
Así dice el informe anual de inteligencia entregado al Parlamento italiano este miércoles.
Según el documento, la propuesta de aumentar las Fuerzas Armadas rusas con hasta 1,5 millones de soldados "confirma la intención" del régimen de Putin de "continuar el conflicto hasta alcanzar sus principales objetivos".
Por otro lado, los servicios de inteligencia italianos evalúan como "improbable" la posibilidad de que Moscú utilice armas nucleares en este momento.
Según el informe, Rusia comenzó 2023 controlando alrededor del 20 % del territorio ucraniano y más del 75 % de la costa del país. Casi el 50% de la infraestructura energética de Ucrania resultó dañada.
El documento también advierte que Rusia "no dejará de interferir en la dinámica política" de los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), "recurriendo más que en el pasado a métodos coercitivos y manipuladores, como ciberataques, desinformación y chantaje".
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