Al menos 15 personas murieron, algunas de ellas civiles, incluidas dos mujeres, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (Ondus), una organización no gubernamental con sede en Gran Bretaña.
Cinco muertos, entre ellos un soldado, y 15 civiles heridos, algunos en estado crítico, es en cambio el saldo oficial facilitado por el ministerio de Defensa sirio que habló de "agresión aérea" por parte del "enemigo israelí desde los Altos del Golán", que "afectó a varias zonas de Damasco y sus alrededores, incluidos los distritos residenciales".
Es "el ataque israelí más sangriento desde el comienzo de la guerra civil en 2011", agregó Rami Abdel Rahman, jefe del Observatorio, según el cual misiles israelíes también atacaron un depósito de la milicia pro iraní y del Hezbolá libanés cerca de Damasco.
En Teherán, el portavoz de la diplomacia iraní, Nasser Kanani, "condenó enérgicamente los ataques del régimen sionista". Según la agencia Tasnim, "ningún iraní resultó herido". La posición de Rusia también es dura, Moscú habla de una "violación flagrante del derecho internacional" a través de las declaraciones de la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova.
No ha habido comentarios de las Fuerzas de Defensa de Israel, en línea con su política de silencio sobre los ataques de la fuerza aérea. Israel lleva a cabo regularmente redadas, en particular contra las milicias pro iraníes que trabajan junto al régimen sirio, pero no sin dar confirmación. Y las áreas residenciales de la capital siria rara vez se ven afectadas.
"El ataque golpeó un área cerca de las instalaciones iraníes", escribió The Times of Israel, mientras que para Orient News, los medios de comunicación de la oposición siria, "la redada tuvo como objetivo a los oficiales de la milicia iraní en su escuela en Kafr Sousa".
Las imágenes que circularon en las redes sociales mostraban escenas de devastación, un enorme cráter en la calle y edificios dañados, incluidos algunos edificios históricos en el barrio medieval de la capital siria, según el director del departamento de antigüedades de Siria, Nazir Awad.
Desde el inicio de la guerra en Siria en 2011, Israel ha llevado a cabo cientos de ataques aéreos contra el país vecino, principalmente contra las posiciones del ejército sirio, las fuerzas iraníes y Hezbolá.
A principios de enero, cuatro personas, incluidos dos soldados sirios, murieron en ataques israelíes contra el aeropuerto internacional de Damasco, según la ONDUS. La ONG dijo que, también en este caso, las redadas tenían como objetivo "posiciones de Hezbolá y grupos proiraníes, incluido un depósito de armas".
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