Kopuk, un perro Retriever, fue asignado con su equipo de rescatistas a Malatya, una ciudad en la provincia de Kahramanmaras, Turquía, que fue duramente golpeada por el terremoto.
    Desde su llegada, el perro se puso inmediatamente manos a la obra, liderando el rescate donde aún olía a vida. Se lastimó las patas mientras hurgaba entre los escombros y le pusieron varios puntos de sutura. Pero no se detuvo y contribuyó al rescate de al menos cinco personas, contó l aprensa turca.
    Por otro lado, Proteo, uno de los 16 perros de rescate enviados a Turquía desde México, murió "en acción", así lo anunció ayer la Secretaría de la Defensa Mexicana, según informaron medios nacionales. El ministerio no reveló la causa de la muerte del perro.
    "Gracias Proteo por tu heroica labor, has cumplido la misión del ejército mexicano", dijo la Secretaría de Defensa en un comunicado.
    "Miembros del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos lamentamos profundamente la pérdida de nuestro gran compañero, el perro 'Proteus', has cumplido tu misión como miembro de la delegación mexicana en la búsqueda y rescate de nuestros hermanos en Turquía", prosigue la nota. "Estamos orgullosos de ti", sentencia.
   

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