Lo informó el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en su último boletín semanal, respecto a la tendencia de la crisis que se presenta en el país desde principios de diciembre y desde el fin de la estrategia de "tolerancia cero" al virus.
Además, "no se ha detectado ninguna variante nueva después del 12 de diciembre" y "la cantidad de muertes y casos graves también está disminuyendo", dijo un funcionario del CDC.
"El aumento reciente de COVID-19 en China alcanzó su punto máximo a fines de diciembre de 2022 y ha disminuido constantemente desde entonces", con tendencias similares observadas en provincias y áreas urbanas y rurales, dijo el CDC, según un informe de análisis preliminar de datos nacionales sobre diagnóstico, tratamiento y vigilancia de contagios del 9 de diciembre al 23 de enero.
Además, precisó que "el número de pacientes ambulatorios, ingresos graves y muertes hospitalarias disminuyó de manera constante. La propagación del virus cayó a un nivel bajo a fines de enero de 2023 y la presión sobre el sistema médico se alivió aún más".
La actualización mostró que la tasa positiva de pruebas de ácido nucleico en China alcanzó su punto máximo el 25 de diciembre de 2022, con un 29,2 %, y la de detección de antígenos el 22 de diciembre, con un 21,3 %, ambos descendieron a menos del 6 % el 23 de enero de 2023.
La tasa total de contagios durante el Año Nuevo Lunar "fue baja y los casos han ido disminuyendo constantemente en varios lugares de China", dijo Mi Feng, portavoz de la Comisión Nacional de Salud, en la conferencia de prensa de hoy, para la cual no se informó ninguna nueva variante de Covid hallada durante las vacaciones.
"BA.5.2 y BF.7 son las variantes dominantes", especificó Mi.
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