La docente y activista, está encarcelada en la capital húngara hace más de 15 meses, acusada de haber atacado a militantes de ultraderecha durante una marcha callejera.
El recurso fue presentado por los abogados de Ilaria Salis contra la decisión del juez Jozsef Sós, que en la última audiencia del 28 de marzo había negado su arresto domiciliario, tanto en Italia como en Hungría.
Ahora, en apelación, el recurso fue aceptado y activista milanesa de 39 años, candidata por AVS, la alianza de verdes e izquierda, para las próximas elecciones europeas, dejará la prisión apenas pague la fianza. La medida prevé que use una tobillera electrónica.
"Ilaria está encantada de poder finalmente salir de prisión y estamos muy contentos de poder abrazarla de nuevo", dijo a ANSA su padre, Roberto Salis, al comentar la decisión del tribunal húngaro.
"Ella aún no ha salido del pozo - añadió, pero sin duda será muy agradable poder abrazarla de nuevo después de 15 meses, aunque mientras esté en Hungría no me siento completamente a gusto", agregó.
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