Muchos en Teherán prefirieron abandonar la ciudad por temor a un conflicto inminente, lo que provocó un intenso tráfico en las carreteras que rodean la capital a partir de medianoche, mientras que delante de las gasolineras se formaban largas colas de coches, incluidos los que se habían puesto en viaje y que temían que en algún momento se acabara el combustible debido a una posible guerra.
"Después de la noticia del ataque, mi familia y yo no pudimos dormir hasta la mañana por temor a una gran guerra entre Irán e Israel. Estábamos estresados, revisamos las redes sociales para ver las últimas noticias", dijo a ANSA Nazanin, de 20 años, agregando: "A diferencia de nuestro gobierno, nosotros, los iraníes, siempre hemos estado en contra de cualquier conflicto con Israel o cualquier otro país, porque tenemos que vivir una vida normal y pacífica." Un comerciante afirmó que, además del impacto psicológico de los ataques, el alto costo del conflicto recaerá sobre el pueblo iraní: miles de millones de dólares por cientos de misiles y drones.
Vahid, de 43 años, añadió que el precio del dólar y del oro aumentó y que esto afectará al precio de otros bienes en el país. Se refería al tipo de cambio de cada dólar, que subió a 700.000 riales tras el ataque del domingo. Y a las casas de cambio y a los medios de comunicación se les prohibió hablar del tema.
Según Nahid, profesora de 30 años, los iraníes están tan desesperados que quieren un ataque de Israel, con la esperanza de que ponga fin a las numerosas crisis internas y externas provocadas por el gobierno.
"Siempre hemos estado en crisis debido al aventurerismo del gobierno extremista. No goza del apoyo del pueblo ni de un amigo entre países extranjeros", añadió.
Por el contrario, Mohammad, un estudiante universitario, destacó que apoya la posición de Irán hacia Israel y los ataques: "Israel debería ser castigado por sus crímenes contra Irán y los palestinos y el ataque fue una advertencia contra sus partidarios, como Estados Unidos".
"Anoche salí a la calle para celebrar ese ataque", dijo Mohammad, de 25 años, el cual fue una de las numerosas personas que apoyan el trabajo del gobierno y que participaron en la celebración organizada por las autoridades en ciudades como Teherán, Gorgan y Khorramabad. .
Mientras tanto, los vídeos virales están en el centro de muchas discusiones en las redes sociales que muestran los restos de algunos misiles y drones que estaban destinados a Israel pero que explotaron o se estrellaron antes de cruzar las fronteras, cerca de algunas ciudades como Shiraz, Andimeshk, Behbahan e Isfahan: en las imágenes también se puede ver una casa destruida tras ser impactada, cerca de Shiraz.
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