Así trascendió en un comunicado sobre la decisión del Ejecutivo de la organización tras examinar las medidas tomadas por Rusia para eliminar las numerosas violaciones que cometió contra el oponente de Vladimir Putin.
Aunque Rusia ya no forma parte del Consejo de Europa, del que fue excluida en 2022, el país todavía tiene la obligación de remediar las violaciones constatadas por la Comisión Europea de Derechos Humanos (CEDU).
"La muerte de Navalny parece ser la consecuencia alarmante de un patrón de victimización y persecución política en represalia por sus protestas antigubernamentales y sus actividades de investigación", afirmó el comité de ministros.
Además, "dada la desconfianza en las instituciones rusas", Estrasburgo "insta encarecidamente a las autoridades a realizar una investigación sobre la muerte de Navalny a través de un mecanismo internacional ad hoc, para garantizar que la investigación sea eficaz, independiente, imparcial, rápida, exhaustiva, transparente".
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