Lo revelaron los funcionarios egipcios al diario al Wall Street Journal, especificando que en el caso de una gran afluencia de palestinos desde Gaza, Egipto intentaría limitar el número de refugiados muy por debajo de la capacidad del área a alrededor de 50 mil a 60 mil personas.
Las autoridades egipcias, sin embargo, niegan que estén construyendo el proyecto.
Durante semanas, Egipto intentó reforzar la seguridad a lo largo de la frontera para mantener alejados a los palestinos, desplegando soldados y tanques.
Más de 100.000 personas podrían alojarse en el nuevo campamento, rodeado de muros de hormigón, dijeron funcionarios egipcios, añadiendo que también se había entregado al lugar un gran número de tiendas de campaña, aún no montadas.
El Cairo lleva semanas intentando impedir que una oleada de refugiados cruce las fronteras de Egipto, amenazando incluso con retirarse del tratado de paz de diez años con Israel si esto ocurriera tras su ofensiva contra Hamás.
El hecho de que El Cairo esté aplicando ahora planes de contingencia indica que los funcionarios egipcios ven este peligro cada vez más cerca.
El gobernador del Sinaí del Norte negó los informes sobre la construcción de un campo de refugiados para palestinos, diciendo que la actividad en la zona es parte de un proyecto para inventariar las casas destruidas durante la campaña militar egipcia contra los extremistas del Estado Islámico en la zona.
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