"Una escalada de los combates en Rafah, que ya se está tambaleando por el extraordinario número de personas desplazadas de otras partes de Gaza, será otra fase devastadora en una guerra que, según se informa, ha matado a más de 27.000 personas, en su mayoría mujeres y niños", acotó la funcionaria.
"Miles más -añadió- podrían morir a causa de la violencia o por la falta de servicios esenciales y la mayor interrupción de la asistencia humanitaria. Necesitamos que los últimos hospitales, refugios, mercados y sistemas de agua que quedan en Gaza sigan funcionando. Sin ellos, El hambre y las enfermedades se dispararán y se cobrarán más vidas de niños".
"Hago un llamamiento a todas las partes en el conflicto para que -subrayó Russell- respeten sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario".
Esto incluye la máxima atención a preservar a los civiles y a las infraestructuras civiles, a satisfacer las necesidades esenciales de los civiles y a facilitar un acceso humanitario rápido, seguro y sin obstáculos, apuntó.
"Las operaciones militares en zonas residenciales densamente pobladas pueden tener efectos indiscriminados.
Necesitamos un alto el fuego humanitario inmediato en Gaza y una liberación segura e inmediata de todos los rehenes, especialmente los niños, que han sufrido tanto", prosiguió la responsable de Unicef.
"Un alto el fuego humanitario -concluyó- salvará vidas.
Permitirá ampliar la respuesta humanitaria y ayudará a brindar la mejor protección a los niños cuyas vidas y futuros están en juego".
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA