El secretario de Estado parte hoy hacia su misión en Medio Oriente y esta semana hará escala en Israel y Cisjordania por quinta vez desde el ataque del pasado del 7 de octubre por parte de Hamás.
Sin embargo, las protestas en su contra continúan con carteles que lo acusan de ser un "criminal de guerra". "Aquí vive el sanguinario Blinken", decía otro, mientras en la acera alguien escribía: "Secretario del genocidio".
"Enfrentamos el frío, el viento y la lluvia las 24 horas del día para implorar a Blinken que apoye un alto el fuego inmediato en Gaza", escribieron en un comunicado los organizadores de la protesta denominada "Occupy Blinken", que lleva el nombre de la protesta fuera de la Bolsa de Nueva York desde hace unos años "Occupy Wall Street".
El secretario de Estado no fue el único blanco de los manifestantes en los últimos meses: también se organizaron protestas frente a la residencia del secretario de Defensa, Lloyd Austin, y del Asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan.
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