Las elecciones presidenciales del 30 de abril las ganó por amplio margen el economista Santiago Peña, del conservador Partido Colorado, por delante de Alegre, de la Concertación Nacional, y del ultraderechista Paraguayo Cubas, que acabó en la cárcel por alentar duras protestas por el informe presunto fraude.
Alegre pide la apertura de todos los sobres marcados con el número 4, que contienen votos en blanco y nulos, así como la liberación de todos aquellos detenidos por la policía, incluido el ex candidato de Cruzada Nacional Cubas.
En su llamamiento, escribe el diario Última Hora, Alegre pregunta entre otras cosas: "¿Qué es lo que no quieren mostrar? ¿Qué es lo que no quieren que la gente sepa? ¿Qué hay en los sobres 4?".
Los dos candidatos derrotados de centro-izquierda y derecha están efectivamente convencidos de que los resultados de las elecciones presidenciales y la victoria arrolladora del Partido Colorado se deben a un presunto gran fraude organizado con el apoyo del aparato de gobierno.
Alegre, derrotado en su tercer intento por llegar a la presidencia, ahora es objeto de fuertes críticas por parte de su partido que le pide su renuncia.
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