La noticia fue adelantada hoy por Infovaticana y confirmada por fuentes de La Moncloa.
Los restos de Primo de Rivera (1903-1936) serán trasladados al cementerio de San Isidro, en Madrid.
La exhumación se produce en cumplimiento con la Ley de Memoria Democrática, aprobada en noviembre pasado por el gobierno de Pedro Sánchez.
El ejecutivo de Sánchez ya exhumó en octubre de 2019 los restos del dictador Francisco Franco, fallecido en 1975, del Valle de Cuelgamuros, antes llamado Valle de los Caídos, al cementerio de El Pardo (Madrid).
La ley de Memoria Democrática obliga a reubicar los restos situados en un lugar "preeminente" de la basílica del Valle de los Caídos.
La familia de Primo de Rivera pidió llevar el proceso de exhumación "en la intimidad", al contrario de lo ocurrido cuando fueron exhumados los restos de Franco, que estuvo rodeada de gran expectación mediática.
"El proceso de exhumación debe permanecer y permanecerá dentro de la estricta intimidad familiar, sin que pueda convertirse en una exhibición pública propensa a confrontaciones de ninguna clase entre españoles", dijo.
En un comunicado difundido en octubre, criticó la decisión del gobierno: "José Antonio seguirá manteniendo el sitio preeminente que le corresponde en la memoria de muchos españoles y no podrá ser objeto de más humillaciones".
Primo de Rivera fue enterrado en la Basílica del Valle de los Caídos en 1939 tras ser ejecutado en Alicante (este del país).
La familia dijo sentirse "obligada" a cumplir la voluntad de Primo de Rivera y proceder a una inhumación "en un cementerio sagrado de acuerdo con el rito católico".
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA