Maternidad arrepentida en "El castigo"

Filme del chileno Matías Bize, compite en festival de Málaga

(ANSA) - MALAGA 17 MAR - "El castigo", película del chileno Matías Bize, que compite en el Festival de cine de Málaga, cuenta una "historia políticamente necesaria", la de la "maternidad arrepentida", dijo en entrevista a ANSA.
    Y lo hace con un plano secuencia de 86 minutos rodado en Lago Ranco (sur de Chile) con el objetivo de que "la historia creciera".
    La historia, subraya, "gana verdad con el plano-secuencia, no hay artificios, no queríamos que las cámaras se lucieran".
    A partir de la búsqueda de un niño en un bosque por parte de sus padres, Ana (Antonia Zegers) y Mateo (Néstor Cantillana), brotan revelaciones, como que una parte de ella, una madre "arrepentida", espera no encontrar a su hijo porque desde que nació no fue feliz.
    Tocar este tema tabú en la pantalla no hace a la historia "políticamente incorrecta" sino "políticamente necesaria", apunta el cineasta.
    "Existe un mandato de que con la maternidad te vas a sentir realizada", señala a su lado la actriz, y "que tenemos que hacer de todo sin que se note que tenemos hijos".
    A su juicio "no hemos tenido el verbo para decirlo. Hay una conversación pendiente entre hombres y mujeres", como la que en esta cinta falta entre la pareja.
    Zegers subraya que "estamos solas con nuestros hijos y que hay una conversación necesaria desde el feminismo. El tema está puesto sobre la mesa".
    Bize (Santiago de Chile, 1979) se siente orgulloso de que "El castigo", premiada como Mejor película chilena 2022 del Círculo de críticos de arte de Chile, donde fue estrenada en salas, "haya generado esa conversación, esa catarsis" entre los espectadores.
    A Zegers una espectadora le dijo: "Yo nunca llegué a expresar todo eso, pero lo he sentido todo".
    La historia plantea preguntas como "¿Qué pasa cuando tenemos un hijo que no es fácil? o ¿Cómo nos organizamos como padres?, pues en el 80% de las veces recae en las madres", señala el director.
    Son "conversaciones que deberían tenerse antes, en los colegios, también para entender a nuestros padres".
    Bize llevaba 20 años queriendo hacer otra película en plano secuencia después de "Sábado" (2013), rodada con la misma actriz.
    La cinta es la sexta toma de las siete que se realizaron, y en las que los actores pusieron su "oficio del teatro", señala la actriz.
    Zegers, candidata en los premios Platino a mejor actriz, que se entregan el próximo 22 de abril en Madrid, destaca el "cansancio verdadero que sintió al final de las tomas, de tanto buscar al niño, un cansancio muy difícil de interpretarlo si no lo sientes". (ANSA).