En éxtasis por el título de Napoli, la afición del club italiano celebró la conquista del tercer Scudetto hasta la madrugada de este viernes.
La fiesta se concentró principalmente en Nápoles, donde miles de personas tomaron las calles principales. La ciudad de Udine, donde se jugó el último partido, un empato 1-1 con el Udinese que consagró al equipo, también se tiñó de azul por la gran concentración de napolitanos.
En la capital de la región de Campania, prácticamente todos los barrios participaron en cánticos, abrazos, fuegos artificiales y bombas de humo.
Más de 20.000 personas se reunieron solo entre las plazas de Trieste y Trento y Plebiscito. La fiesta de la afición estuvo acompañada por la delegación del equipo de Campana, que celebró durante toda la noche en el hotel "Là di Moret", donde se alojaron los jugadores del Napoli en Údine.
La delegación debe abandonar el lugar solo después de las 13:30 (8:30 hora de Brasilia). Los fanáticos comenzaron a regresar a sus hogares alrededor de las cuatro de la mañana, ya que el resto del día estará marcado por más celebraciones.
A pesar del ambiente festivo, las celebraciones no estuvieron exentas de incidentes. Un joven aficionado, que iba con otras tres personas, fue hospitalizado en estado grave tras ser atropellado en Via Pio XII.
En otro triste incidente, un aficionado napolitano murió tras sufrir un paro cardíaco cerca de una estación de tren en Udine. El hombre vivía en Austria y vio el partido por el título en el Dacia Arena.
El empate 1-1 contra el Udinese le dio al Nápoles su histórico tercer Scudetto, rompiendo la larga sequía de 33 años del club partenopeo.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA