(ANSA) ROMA - El Istat, el instituto oficial de estadísticas, estima que el producto interior bruto (PIB), expresado en valores encadenados con año de referencia 2015, corregido de efectos de calendario y desestacionalizado, se mantuvo estacionario tanto respecto al trimestre anterior como al tercer trimestre de 2022.
De este modo, la economía italiana se mantiene estable tras el descenso registrado en el segundo trimestre del año. La dinámica tendencial también es estable, interrumpiendo un crecimiento que se había prolongado durante diez trimestres consecutivos.
El tercer trimestre de 2023, explica el Istat, tuvo tres días laborables más que el trimestre anterior y un día laborable menos que el tercer trimestre de 2022.
El cambio en la situación económica es el resultado de una disminución del valor añadido en el sector de la agricultura, la silvicultura y la pesca, un aumento en el sector industrial y una situación estacionaria en el sector servicios.
Por el lado de la demanda, hay una contribución negativa del componente interior (antes de inventarios) y una contribución positiva del componente exterior neto.
La variación adquirida del producto interior bruto para 2023 es del +0,7%. Se trata del mismo nivel que en el trimestre anterior.
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