(ANSA) VENECIA - A partir del año que viene, todo aquel que quiera visitar Venecia deberá pagar una entrada. Así lo definió la prefectura este martes, al lanzar el reglamento que establecerá la tarifa de acceso y que será votado por la Cámara Municipal el 12 de septiembre. El objetivo, evidente, es desalentar el turismo de excursiones de un día en determinadas épocas, para evitar que la ciudad se asfixie y se vuelva inhabitable para los residentes.
La experiencia para 2024 rondará los 30 días, que se definirán en las próximas semanas. En términos generales, la prueba piloto se centrará en las vacaciones de primavera y los fines de semana de verano.
El mecanismo, al menos sobre el papel, es bastante sencillo y prevé exenciones para quienes viven o trabajan en la ciudad.
El billete, inicialmente de 5 euros, debe ser adquirido por cualquier persona mayor de 14 años que ingrese a la ciudad para una visita diaria.
Quienes se alojen en estructuras de la ciudad también estarán exentos; residentes de la región del Véneto; cualquiera que acuda hasta allí en busca de servicios de salud o participe en competiciones deportivas; y cónyuges, convivientes y familiares de tercer grado de residentes en la ciudad.
"Estamos a la vanguardia mundial, conscientes de la urgencia de encontrar un nuevo equilibrio entre los derechos de quienes viven, estudian y trabajan en Venecia y de quienes visitan la ciudad", declaró el secretario de Turismo, Simone Venturini.
"El sistema de reservas no es una herramienta de recaudación, de hecho solo cubrirá los costes del sistema, pero garantizará a los residentes una mejor calidad de vida y a los turistas que pernoctan la posibilidad de vivir emociones más vívidas. Después de un largo y difícil proceso, ha llegado el momento de actuar concretamente, como siempre lo hacemos", concluyó. (ANSA).