El tiempo se acaba, la revisión es profunda, los puntos críticos podrían ser otros: con el fin de las vacaciones, se reinicia inmediatamente el enfrentamiento entre Italia y la Comisión Europea sobre el nuevo Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia (PNRR) presentado por el gobierno de Giorgia Meloni.
La primera misión en Bruselas será la responsable en abrir el juego después de las vacaciones del ministro para los Asuntos den la Unión Europea, Sur y PNRR, Raffaele Fitto, que se reunirá este lunes en el Palacio Berlaymont con Celine Gauer, jefa del Grupo de Trabajo Europeo para la Recuperación.
No será una reunión exhaustiva, sino una primera visión general del nuevo PNRR. Un plan que el gobierno de Meloni revisó en profundidad, afectando a 144 proyectos y reformas de las aproximadamente 350 previstas inicialmente.
"Italia presentó su solicitud de revisión del PNRR, como se esperaba. Mañana se celebrará una reunión que permitirá a la Comisión iniciar bien los trabajos de análisis", explicó el ejecutivo europeo.
"Los datos que empiezan a llegar son positivos y reconfortantes, hay que trabajar para que mejoren y la revisión del Plan es un elemento importante", subrayó Fitto durante su visita a Cernobbio.
El cronograma italiano sobre el PNRR, entre fines de julio y principios de agosto, tuvo una aceleración notable. Después de una larga espera y una doble intervención de modificaciones, la solicitud del tercer tramo de 18.500 millones recibió luz verde de la Comisión. Con el sí del Consejo de la UE, en los próximos días la transferencia europea debería materializarse.
Al mismo tiempo, el Palacio Berlaymont examina las modificaciones introducidas por el gobierno en los objetivos relativos al cuarto tramo (cuya solicitud debería haberse recibido a finales de junio).
El visto bueno parece poco más que una formalidad, dado que el gobierno y Bruselas trabajaron conjuntamente en los cambios puestos del negro sobre blanco. En ese momento, Italia presentará una solicitud oficial para el cuarto tramo, con el objetivo de recaudar el tramo de 16.500 millones antes de fin de año.
Pero es sobre la revisión del PNRR -al que se añadió el capítulo Repower-donde el debate promete ser complejo. Fuentes cercanas al expediente explican que, por el momento, no hay ningún ámbito concreto en el que la UE haya destacado cuestiones críticas. Al mismo tiempo, se espera que el trabajo de análisis sea largo y no se pueden descartar correcciones.
La voluntad de la Comisión sigue siendo la de colaborar con todos los países miembros. Y para Ursula von der Leyen, que podría presentarse nuevamente a la presidencia de la Comisión en 2024, ciertamente no es el momento de hacerse enemigos entre los 27.
"Todos se concentran en esta pseudopolémica con las comunas y pocos se centran, por ejemplo, en RepowerEu, la propuesta nacional que prevé inversiones estratégicas en las redes y que también prevé intervenciones con incentivos para familias y empresas por un importe de alrededor de 20 mil millones", observó Fitto.
Sobre el plan financiero, Italia no solicitó más préstamos (en total, la UE se queda con un tesoro de 93 mil millones de euros), pero sigue siendo uno de los cinco países que, en cualquier caso, pidieron toda la cuota disponible.
Y desde Cernobbio, mientras tanto, el jefe de Justicia, Carlo Nordio, lanzó su advertencia sobre uno de los ámbitos de aplicación del PNRR: "Estamos en dificultades sobre la liquidación de los atrasos en las causas civiles, haremos todo lo posible".
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