Venezuela recibirá esta semana un cargamento de aproximadamente 330 mil barriles de gasolina desde la refinería italiana de Milazzo, operada por un consorcio entre la europea ENI y Kuwait Petroleum.
El cargamento llegará a la refinería venezolana Cardón (Falcón), según datos de Refinitiv Eikon, y representa la primera entrega que se realiza tras la ampliación del acuerdo entre la estatal, Petróleos de Venezuela (PDVSA) y la italiana ENI, que permite el suministro de combustible. PDVSA ha enviado, en lo que va del año siete cargamentos de crudo venezolano a ENI, que ejerce como receptor del crudo para ella y para la española Repsol, tras la firma de acuerdos en el mes de mayo que permitió a ambas empresas europeas exportar líquidos de gas natural (LNG). Ahora, tanto ENI como Repsol planean ampliar un acuerdo de petróleo por deuda con Venezuela bajo la aprobación del Gobierno de Estados Unidos, según una nota de Reuters que indicó que personas vinculadas al tema detallaron que el objetivo es suministrar productos refinados a PDVSA e impulsar los despachos de petróleo a Europa, Además, ENI mantiene conversaciones con PDVSA con el fin de aumentar la producción en el campo "Corocoro", un proyecto conjunto de aguas poco profundas que ha estado produciendo crudo de forma intermitente desde 2021, con miras a reanudar las exportaciones congeladas desde 2019 en este campo que es operado por la empresa mixta Petrosucre, entre Eni y PDVSA.
De resultar exitosas las conversaciones entre ENI, Repsol y PDVSA podría expandirse el proyecto costa afuera "Perla", que proporciona gas natural para generación eléctrica.
El proyecto Perla, ubicado cerca de la frontera marítima con Colombia, permite a PDVSA comprar alrededor de 550 millones de pies cúbicos por día de gas natural producido por ENI y Repsol a precios internacionales.
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