El turismo religioso, que acoge a los peregrinos en conventos adaptados a la hospitalidad o a las familias en casas de vacaciones, se vuelve cada vez más "verde".
De hecho, la sostenibilidad es un objetivo al que tienden la mayoría de las estructuras.
Esto se desprende de una encuesta de Hospitalidad Religiosa, asociación vinculada a la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), que recuerda que el 1 de septiembre será la 18ª Jornada de la Custodia de la Creación y el 27 de septiembre se celebrará la 44ª Jornada Mundial del Turismo, dedicada a este año a "Turismo e inversiones verdes".
El 80% de las estructuras encuestadas -entre los gestores de alojamientos religiosos y sin ánimo de lucro, que representan unas 250.000 camas en Italia- realizan una recogida selectiva de residuos también de los huéspedes, con un aumento del 1% anual en el último año.
Los detergentes ecológicos se utilizan siempre o casi siempre en el 57% de las estructuras, con un salto de 14 puntos porcentuales desde 2015 hasta la actualidad.
En el mismo período, las estructuras que utilizan sistemas automáticos de ahorro de energía aumentaron del 85% al 91%, abarcando casi la totalidad de estos establecimientos de alojamiento.
Los que utilizan energía de producción propia (como la procedente de paneles solares) representan el 26%, más de uno de cada cuatro, a los que se suma otro 27% que pretende adquirirla lo antes posible.
También crece la presencia de alimentos ecológicos, utilizados siempre o frecuentemente en el 43% de las cocinas.
En la mitad de estas estructuras también se suele consumir comida de kilómetro cero. En el uso de cubiertos y platos se produce ya una transición definitiva del plástico desechable al compostable, pero el 91% de los directivos que prefieren el metal y la porcelana para lavar se mantienen estables.
En general, según se desprende de esta encuesta, casi todos los directivos (94%) admiten que se podría hacer más en el ámbito de la eco sostenibilidad, pero la mayoría se queja de los costes de los ajustes estructurales.
El presidente de la Asociación de Hospitalidad Religiosa, Fabio Rocchi, subrayó que los datos muestran que "el cuidado esmerado por la Creación es la señal que se debe dar al mundo del turismo sobre cómo es posible combinar ética y hospitalidad, implicando también a los huéspedes en un común camino de respeto".
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