Fuentes oficiales españolas subrayan que el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, impulsó con fuerza la organización de esta cumbre, que ha reservado una de las prioridades en política exterior de sus dos Gobiernos (2018-2019, 2020 -2023) para el desarrollo de las relaciones con América Latina.
Y ahora, apuntan las mismas fuentes, también por parte del resto de socios europeos existe el convencimiento de que la cita de la próxima semana, que presidirá el presidente del Consejo Europeo Charles Michel, podría ser fructífera en varios expedientes.
Se esperan representantes de todos los países de América Latina y el Caribe en la cumbre, así como de los estados miembros de la UE.
Pero eso no es todo: también se espera la presencia de muchas grandes empresas de las dos regiones.
En la mesa de discusión de Bruselas probablemente habrá temas como las negociaciones del acuerdo UE-Mercosur, las relaciones bilaterales entre varios de los países involucrados en la reunión y los planes de desarrollo económico.
Por ejemplo, se espera la presentación de varios grandes proyectos enfocados en particular en la transición verde y digital en los países de América Latina.
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