"Es una gira importante que tendrá como aspecto principal la agenda económica. Son varios temas posibles, desde la incorporación de Brasil a la Ruta de la Seda, las inversiones chinas, el comercio en monedas locales, pero todavía no hay nada concreto, hay que aguardar los anuncios oficiales", señaló Ricupero.
Para este diplomático experimentado y académico prestigioso, hijo de inmigrantes italianos, el viaje Lula también puede ser leído como la búsqueda de apoyo para la economía brasileña bastante alicaída.
La agenda del mandatario se iniciará el jueves en Pekín, donde tendrá encuentros con empresarios y participará en la ceremonia donde la expresidenta brasileña Dilma Rousseff asumirá la titularidad del Banco del grupo BRICS.
El momento más importante de su periplo chino será el viernes, cuando será recibido por el mandatario, Xi Jinping, y otras altas autoridades.
El viaje debió haberse realizado el 26 de marzo, pero fue suspendido debido a que Lula contrajo una neumonía.
Ricupero sostiene que el líder brasileño "tiene motivos" para apostar en que Xi de luz verde a inversiones en infraestructura, industria automotriz y otros sectores que permitan un "mayor crecimiento" económico en Brasil, cuyo Producto Bruto Interno debe avanzar sólo el 0,9 % en 2023.
El propio Lula declaró horas antes de embarcar que apuesta en recibir fondos chinos que contribuyan a una aceleración económica y a crear empleos: "mi obsesión en generar trabajo", declaró.
Ricupero señaló la "importancia" del encuentro que Lula debe tener con directivos de la gigante de las comunicaciones Huawei.
"Se ha publicado en la prensa que habría descontento de algunos sectores con la reunión de Lula y Huawei, pero no creo que sea suspendida", apuntó.
"Actualmente, en Brasil la mitad de los equipos de comunicaciones, de 5G, son de Huawei, en esa área hay una rivalidad entre Estados Unidos y China, esto ya se vio en el gobierno de Jair Bolsonaro con las subastas de 5G, ante lo cual se optó por una salida intermedia: se autorizó a Huawei participar en las licitaciones privadas, pero no en las de áreas públicas como Ejército y Gobierno", reseñó el embajador.
Ricupero, que fue ministro de Hacienda y secretario general de la UNCTAD, agencia de la ONU para el comercio y el desarrollo, observa con cautela la firma de un acuerdo sobre la utilización de monedas locales. pese a que Pekín representa el "26% de nuestras exportaciones, y ese porcentaje ha crecido bastante en los últimos años" y es "nuestro principal socio comercial".
En ese sentido, el diplomático declaró tener "dudas" sobre la "conveniencia" para Brasil de firmar un entendimiento sobre trasladar el comercio bilateral que actualmente es en dólares a transacciones en yuanes y reales.
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