De acuerdo con los especialistas, los segmentos más afectados son el industrial, la construcción y la vivienda, que desde ahora se pronostican sufrirán una fuerte desaceleración durante el presente año.
El dinero caro pega duro en especial a quienes tienen "una mayor dependencia de los créditos" y con "una mayor sensibilidad al financiamiento", afirmó Janneth Quiroz, economista en jefe de la firma GF Monex.
Los sectores más impactados son aquellos que "necesitan mayor apalancamiento para aumentar su producción", a juicio de Quiroz, quien dijo que la mayor repercusión en las tasas de interés se dará a corto y mediano plazo y no tanto a largo plazo.
El Banco de México (Banxico, central) ha anticipado que las tasas de interés de referencia se mantendrán elevadas este año y podrían empezar a bajar hasta la primera mitad de 2024.
El sector que espera sufrir también un duro golpe es el manufacturero, pero podría paliarlo si la demanda de exportaciones a Estados Unidos se mantiene por más tiempo, según la especialista.
Todavía para la próxima reunión de política monetaria del Banxico, prevista para el próximo 30 de marzo, se espera que aumenten las tasas al menos un cuarto de punto, para llegar a 11,25%, el mismo nivel en que aumentaron esta semana (del 4,75 al 5%) en Estados Unidos, que sirven de pauta para México.
La Encuesta de Expectativas de Citibanamex calcula que el indicador del precio del dinero para todo el sistema crediticio del país podría llegar a 11,50% durante el presente año, aunque no se descarta que la cifra sea más alta.
Quiroz estima que las empresas más afectadas podrían blindarse con coberturas crediticias para esquivar mayores tasas, pues "siguen subiendo y aún no sabemos hasta qué niveles puedan llegar".
No obstante, consideró que una tasa más elevada no tendría un impacto tan poderoso en la economía de México como en el caso de Estados Unidos, porque "el sistema financiero es más pequeño" y "un porcentaje más bajo de la población hace uso de un crédito".
Pamela Díaz, economista para México de BNP Paribas estuvo de acuerdo sobre este enfoque, pero señaló que aún si las tasas de interés bajaran un poco no hay certeza de que las que aplican las instituciones privadas a los créditos también bajarían.
El ciclo alcista en México y el mundo se deriva del fin de la pademia, el desajuste en las cadenas de suministro, y la guerra entre Ucrania y Rusia, que han provocado una alta inflación en muchos países.
En México, los precios han alcanzado un nivel más alto del 8%, el más grande de los últimos 22 años y afectaron el doble a los productos alimenticios y de la canasta básica. La buena noticia es que los precios han comenzado a reducirse de 7,91% en enero a 7,12% para marzo, según fuentes oficiales.
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