Jacobs explicó en un reportaje a la Stampa que decidió viajar a Florida para tomarse "una pausa de la vida pública" a 11 días del inicio del torneo europeo de atletismo previsto en Roma del 7 al 12 de junio.
"A nivel técnico, en Estados Unidos se presta mucha atención al calentamiento y la recuperación. Mucho grounding, es decir, trabajo sobre el césped para suavizar el músculo y la cadena de la espalda de donde empezaron muchos de mis problemas", explicó Jacobs.
"Más importante: encontré mi sueño. En la temporada anterior fui al campo sin ningún propósito", agregó el velocista, que también integró el equipo italiano que ganó la medalla de oro en la posta 4x100 de Tokio 2020.
Jacobs reveló que había "perdido la alegría que me daba la pista" y comentó que "no podía divertirme, no estaba tranquilo y cuando estás tan tenso y pensativo tu cuerpo sufre las consecuencias".
"Por eso decidí cambiar", argumentó Jacobs, quien también se refirió a su decisión de interrumpir su colaboración con Paolo Camossi para comenzar a entrenarse con el estadounidense Rana Reider.
"Antes de Estados Unidos, con Camossi, hice un excelente trabajo porque me trajo el éxito. Reider tiene un método completamente diferente. Sabe exactamente lo que quiere, tiene un motivo claro para cada petición. Es estricto, no lo llamaría sargento, tal vez porque le he dado un toque de italianidad y le gustan mis chistes", relató Jacobs.
Por otra parte, el atleta de 29 años reconoció que le hubiese gustado ser designado abanderado de Italia en París 224, una distinción destinada a Gianmarco Tamberi, campeón olímpico, mundial y europeo de salto en alto.
"Me habría alegrado mucho, hubo buena competición y Gimbo (Tamberi) es el capitán del atletismo, lo ha ganado todo, es un motivador y seguramente sabrá desempeñar ese papel. También tendré que volver a ganar en París para proponerme en Los Ángeles 2028", agregó Jacobs.
"Saber que un poco de lo que hicieron los atletas italianos más jóvenes fue provocado por mis resultados es especial. No pasé de un récord a otro, tuve que sudar cada progresión. El mensaje pasó y tiene un poder increíble. Ninguno de nosotros tiene un poder único, sólo mucha dedicación y ensueño. Creer en mí mismo sin importar lo que digan los demás es mi fuerza", remarcó Jacobs.
Asimismo, el velocista aseguró haberse sentido "abrumado" por el cariño que recibió "especialmente de los niños" en ocasión del Festival Sprint de Roma.
"Cuando estoy entre la gente, realmente siento la gratitud y nunca nadie ha venido a decirme en la cara 'no vales nada, apestas'. Luego están las redes sociales, son esenciales para difundir noticias, aumentan la popularidad, simplemente liberan frustraciones", consideró Jacobs.
"Tuve que trabajar en ello, tantas acusaciones me duelen. La reacción abrumada no es ignorar, sino comprender el mecanismo y desactivarlo", refirió sobre las críticas que recibió en redes sociales.
Jacobs encabeza la lista de 8 italianos que participarán en la "Golden Spike" de Ostrava, en la que se destacan además Leonardo Fabbri (lanzamiento de bala) y Zaynab Dosso (100 metros femenino).
La prueba masculina de 100 metros contará, además de Jacobs, con la presencia de los británicos Jeremiah Azu y Reece Prescod, del jamaiquino Ryiem Forde, del canadiense Jerome Blake, del eslovaco Jan Volko y del checo Zdenek Stromsik.
Por su parte, Fabbri llegará a Ostrava luego de lanzar 22,88 metros en Modena, 22,95 metros en Savona, 22,59 metros en Lucca y 22,91 metros en Asti.
El italiano se medirá con el neozelandés Tom Walsh, el jamaiquino Rajindra Campbell, el nigeriano Chukwuebuka Enekwechi, el croata Filip Mihaljevic y el polaco Konrad Bukowiecki.
A su vez, Dosso, que estableció el récord italiano en Savona, se medirá con la suiza Mujinga Kambundji, finalista olímpica y campeona europea de los 200 metros, y la polaca Ewa Swoboda, medalla de plata en el Mundial bajo techo de Glasgow 2024.
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