La internación de Rieke se conoció horas antes de la primera audiencia prevista justamente este lunes ante el tribunal de Vicenza por la muerte de Rebellin.
Los abogados de Rieke presentaron una solicitud de aplazamiento por impedimento legítimo, que será examinada en las próximas horas.
El Tribunal de Vicenza había rechazado el pasado 11 de marzo la solicitud de acuerdo de culpabilidad presentada por los abogados de Rieke, la misma que ya había sido formulada ante el juez en la audiencia preliminar.
Por tanto, los jueces habían declarado abierto el procedimiento que iniciaba con la primera audiencia, en la que se esperaba el examen de los peritajes sobre el lugar del accidente y sobre el camión.
La esposa, la madre y los tres hermanos de Rebellin ya fueron indemnizados por la compañía de seguros del camión.
Desde el pasado 23 de febrero, el camionero se encontraba bajo arresto domiciliario en un apartamento de unos conocidos en la provincia de Treviso.
Rieke se había entregado el 25 de agosto de 2023 a las autoridades de Vicenza, sin necesidad de que fuese ejecutado el pedido de extradición que pesaba sobre él.
El camionero de 62 años está acusado de homicidio en accidente de tránsito y abandono de persona, pues luego de atropellar al ciclista de 51 años que se entrenaba con su bicicleta, no se detuvo a asistirlo.
La justicia de Vicenza había emitido una orden de arresto en custodia cautelar a nivel europeo contra el camionero, que había sido tramitada ante la magistratura alemana por lo que se fue detenido en su país desde el 17 de junio.
El delito por el que se lo juzgará en Italia es excarcelable en Alemania, razón por la cual Rieke permaneció bajo arresto provisorio durante algún tiempo en la cárcel de Muenster, que abandonó días después con la obligación de permanecer en el país, donde la justicia dispuso su extradición en julio.
Rieke fue identificado como el autor de la tragedia que sacudió al deporte italiano apenas 48 horas después de ocurrida, razón por la cual la policía logró dar con su paradero pese a que había regresado a su país.
En enero, en el camión que manejaba y que permanecía en custodia, los investigadores descubrieron partes de plástico del vehículo que presentaban deformaciones y que habían sido lavadas con detergente, como para ocultar pruebas.
Pero las imágenes filmadas por las cámaras ubicadas en el lugar del incidente, permitieron determinar que Rieke detuvo la marcha durante algunos minutos después de atropellar a Rebellin, aunque sin prestarle asistencia al ciclista.
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