El sistema utilizará imágenes de las cámaras y software de seguimiento para calcular las posiciones de los jugadores en el momento de un potencial offside, reemplazando la necesidad de que los árbitros deban resolver la situación.
En los ensayos realizados hasta ahora en Inglaterra, el uso de esta herramienta tecnológica demostró reducir la duración promedio de una decisión del VAR en 31 segundos.
Los clubes de la Premier League, reunidos en Londres, votaron por unanimidad para introducir esta tecnología, con su primer uso previsto en el otoño boreal, pero no a partir del comienzo de la próxima temporada.
La liga de la primera división del fútbol inglés había expresado previamente reservas sobre la incorporación de esta tecnología, pero luego recibió pleno apoyo del responsable de los árbitros del torneo, Howard Webb, quien aseguró sentirse "entusiasmado" por la idea.
La tecnología del fuera de juego semiautomático fue utilizada con éxito durante el Mundial de Qatar 2022 y elimina la necesidad de que los responsables del VAR agreguen manualmente líneas a las imágenes de las cámaras, produciendo gráficos de alta calidad que pueden ser mostrados a los simpatizantes en los estadios.
En Italia el fuera de juego automático debutó en la Supercopa de la temporada pasada y volvió a ser utilizado el 27 de enero 2023 en la Serie A.
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