El tricampeón mundial neerlandés Max Verstappen conquistó la pole position del Gran Premio de Japón, cuarto de la temporada de la Fórmula 1 en la que Red Bull recuperó el protagonismo en la clasificación y Ferrari no logró repetir las buenas sensaciones tras el uno-dos obtenido en Australia.
Esta vez, el uno-dos lo consiguió la escudería austríaca, de la mano de un Verstappen que sumó su cuarta pole del año, tercera consecutiva en Suzuka y trigésimo sexta en la máxima categoría.
Verstappen, que mañana buscará su tercera victoria en fila en Japón, dejó atrás las malas sensaciones tras su imprevisto abandono en Melbourne, con un giro que completó en 1'28"197 y le permitió relegar por escaso margen a su compañero de equipo, el mexicano Sergio Pérez (1'28"263) Confirmando sus ambiciones de afirmarse como la tercera fuerza en el campeonato, McLaren dijo presente en Suzuka con Lando Norris, quien con un tiempo de 1'28"489 logró instalarse en el tercer casillero de la grilla y moverá flanqueado por la Ferrari del español Carlos Sainz (1'28"682).
Sainz, quien al final de la temporada deberá buscarse escudería tras el arribo al equipo italiano del séxtuple campeón mundial británico Lewis Hamilton, viene de ganar en Australia, donde se confirmó como el único piloto capaz de interrumpir la hegemonía de Red Bull, tal como lo hizo en Singapur el año pasado.
El español, que llegó a Melbourne apenas recuperado de una operación tras sufrir un cuadro de apendicitis que lo marginó del Gran Premio de Arabia Saudita y supo capitalizar como nadie el abandono de Verstappen, se mostró cauto en relación con sus opciones en Suzuka.
"Creo que el objetivo más realista será apuntar al podio", explicó aludiendo a lo conseguido en el inicio de la temporada en Bahrein, cuando acompañó a los pilotos de Red Bull en el tercer escalón del podio, escena que se repitió en Jeda, pero con el monegasco Charles Leclerc ocupando ese lugar.
"No me arrepiento, creo que hoy no podíamos aspirar a más que esto", dijo hoy un Leclerc que padeció problemas de adherencia con los neumáticos en su vuelta rápida y partirá desde la cuarta fila junto a quien será su compañero de equipo en 2025: Hamilton.
El británico celebró su quinta y última victoria en Japón en 2018 (cifra sólo superada por el también séptuple campeón mundial Michael Schumacher, quien festejó cinco de sus seis triunfos con Ferrari), pero mañana no la tendrá fácil pues por delante tendrá rivales de fuste que también irán por la gloria.
Los de Red Bull son los grandes candidatos a repetir lo hecho en las primeras dos competencias del año y a recuperar el protagonismo perdido en Australia, aunque tanto Sainz como Norris, cuyo compañero australiano Oscar Piastri moverá desde la tercera fila junto al bicampeón mundial español Fernando Alonso (Aston Martin), tratarán de impedirlo.
El asturiano, que cantó victoria con Renault en 2006 y en 2008, parece haber elegido una estrategia distinta en lo que hace a la administración de los neumáticos, que será un punto vital en carrera, tal como reconoció Verstappen al finalizar la clasificación.
"Esta pista es muy delicada para las gomas", afirmó al explicar que "a la mitad de la primera vuelta de la Q3 ya se habían desgastado", pese a lo cual logró bajar casi siete décimas al tiempo con el que logró la pole en este trazado hace un año.
Verstappen, quien seguirá en el equipo austríaco la próxima temporada a pesar de los rumores que circulan en el paddock (no sólo en relación con su futuro), según advirtió Christian Horner en la víspera, se mostró feliz por el protagonismo recuperado por Red Bull en la clasificación.
"Es bello ver las dos máquinas en la primera fila", destacó al augurar "ojalá podamos repetir el uno-dos en carrera" y advertir que "Ferrari y McLaren parecen ser muy veloces aquí y nosotros debemos mejorar la puesta a punto".
"Estoy contento por la pole, pero el ritmo de carrera no me convence", afirmó el neerlandés, que tratará de mantener la punta de la competencia en la largada pues, según explicó el jefe del equipo Ferrari, Frederic Vasseur, "será fundamental la primera vuelta para poder tener despejada la pista lo antes posible, aunque superar a los Red Bull no será tarea fácil".
Vasseur dijo tener "bajo control" el tema del desgaste de los neumáticos y apuntó a la Curva 17 como punto crítico, especialmente para Leclerc, porque -dijo- "allí es donde se generaba la mitad de la distancia con Verstappen".
Ferrari mostró un buen ritmo de carrera en la tercera y última sesión libre previa a la clasificación, aunque Sainz explicó que resulta difícil hacer un pronóstico en función de la cantidad de combustible que cargó cada piloto.
Pérez tampoco lucía demasiado optimista sobre sus posibilidades de pelear por la victoria con Verstappen y afirmó: "Las condiciones en este circuito siempre son complicadas y resulta muy fácil perder una o dos décimas para arruinar una vuelta perfecta".
"Hoy estuve bastante cerca de Max (a 66 milésimas, Ndr) y partiré desde una buena posición", comentó el mexicano, quien según Horner depende de sí mismo para continuar en Red Bull la próxima temporada.
Buena clasificación también para Alonso, quien logró un merecido quinto puesto con una estrategia que pareció contrastar con la de su compañero canadiense Lance Stroll (moverá desde el decimosexto puesto con el otro Aston Martin), así como para los pilotos de McLaren.
El séptimo puesto de Hamilton y el noveno de su compañero y compatriota George Russell no anticipan la mejor jornada para Mercedes, una de las escuderías que se mencionaron como posible próximo destino de Verstappen e inclusive como aquella con la que regresaría a la Fórmula 1 en 2025 el tetracampeón alemán Sebastian Vettel tras alejarse de la máxima categoría.
"Sebastian es alguien a quien nunca puedes descartar. Su curriculum es fenomenal y a veces tomarse un descanso es útil para encontrar nuevas motivaciones", aseguró el jefe del equipo alemán, Toto Wolff, al confirmar que estuvo conversando con él a comienzos de esta semana.
Al margen de las especulaciones, el público japonés desbordó las instalaciones de Suzuka con su reconocida coreografía y deliró cuando el piloto local, Yuki Tsunoda, logró superar por un suspiro el segundo corte clasificatorio y consiguió luego un meritorio décimo puesto con Racing Bulls en la grilla de partida.
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