Riccardo Orsolini abrió la cuenta a los 14', el belga Alexis Saelemaekers amplió la ventaja a los 44' y el griego Charalampos Lykogiannis puso cifras definitivas en el segundo minuto agregado del complemento.
Bologna, que alineó al defensor colombiano John Lucumí, suma ahora 57 puntos, dos menos que Juventus, que completa el podio detrás del Milan (65) y del líder Inter (76), que en el último turno del día recibía al Empoli (25).
Por su parte, el argentino Marco Pellegrino jugó hasta los 66' en Salernitana, que sigue último con 14 puntos, diez menos que Sassuolo, penúltimo detrás del Empoli y del Frosinone, ambos con 25 unidades.
"Hay que mejorar en la gestión del resultado", afirmó el DT del Bologna, el ítalobrasileño Thiago Motta, tras la victoria que revalida el sueño de la clasificación a la próxima Champions League.
"Es un momento bonito para todos, en términos de resultados y de juego. Estoy orgulloso y satisfecho de cómo lo estamos viviendo todos, adentro y afuera. Hoy logramos una victoria merecida que dedico a mi hija Sofía, que estaba en la grada", agregó Thiago Motta.
"Nos adelantamos con dos goles bonitos, pero también hay que destacar la fase defensiva, así como la actuación de Lykogiannis", completó el entrenador ítalobrasileño.
Comprensiblemente diferente eran las sensaciones en el vestuario de Salernitana, cuyo Stefano Colantuono enfatizó que "tenemos una obligación moral hacia la sociedad y hacia nuestra gente" para intentar evitar el descenso.
"Intentamos poner en práctica lo que teníamos preparado y algo hubo, pero Bologna es un equipo en estado de gracia. Ahora tenemos un desafío importante por delante", enfatizó Colantuono.
"Más allá de las matemáticas que todavía no nos condenan, debemos honrar este campeonato hasta el final", completó Colantuono, cuarto DT de Salernitana en la temporada después del portugués Paulo Sosa, de Filippo Inzaghi y de Fabio Liverani.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA