Lazio superó hoy por 2-0 como visitante a un Torino que llegaba invicto en los seis partidos disputados este año en un duelo pendiente de la vigésimo primera fecha y escaló al sexto puesto en el campeonato italiano.
En una "ráfaga" de apenas seis minutos, el equipo de Maurizio Sarri resolvió el pleito con goles del francés Mattéo Guendouzi a los 51' y de Danilo Cataldi a los 57' y sumó tres puntos de oro para mantener la ilusión de clasificarse para las próximas Copas Europeas.
"Ganar en Turín no es fácil para nadie. En este estadio sólo lo hizo Inter", resumió el técnico de Lazio al final del partido en el Filadelfia, donde el "granate" de Ivan Juric resignó un largo invicto y dejó pasar un tren, como él mismo definía esa posibilidad de arrimarse a los puestos de vanguardia.
Hoy festeja Lazio, que pese a no ofrecer su mejor versión, logró desembarazarse de un rival de cuidado que pese a los dos goles recibidos sigue ostentando la tercera valla menos vencida del torneo (22), rubro en el que sólo es superado por el líder Inter (12) y por la escolta Juventus (17).
"En el primer tiempo perdimos demasiadas pelotas fáciles, pero logramos irnos al descanso sin sufrir goles y después de los que convertimos controlamos el partido", destacó Sarri, molesto por esas desinteligencias que suelen costarle caras a Lazio.
Su equipo logró sostenter la ventaja a pesar de que terminó el partido con un hombre menos por la expulsión del español Mario Gila a los 79' que pudo haberlo complicado y se reivindicó tras la derrota que padeció el domingo en el Olímpico frente a la ascendente Bologna.
Un Olímpico que Torino visitará el lunes cuando enfrente a una Roma que hoy avanzó por penales a los octavos de final de la Europa League en ese mismo escenario en el cierre de la vigésimo sexta fecha que Bologna pondrá en marcha mañana ante Hellas Verona y que el lunes cerrará también Lazio visitando a Fiorentina.
"No debemos bajar los brazos, ni sentirnos frustrados por esta derrota, que podía llegar en algún momento", destacó Juric al aludir al primer traspié del "granate" en lo que va del año y al decirse "orgulloso porque jugando como lo hicimos hoy serán más los partidos que ganaremos que los que perderemos".
"El sueño de jugar una Copa europea sigue vivo y trataremos de mantenerlo ante otro rival durísimo como la Roma porque queremos darle una alegría a nuestros aficionados y porque tenemos plantel para pelear por eso", agregó el técnico croata al aludir a los aplausos con los que el público despidió al equipo.
Seis minutos fatales terminaron costándole caro a un Torino que hasta el primer gol había jugado mejor que Lazio y contó con al menos cuatro situaciones como para abrir el marcador, pero falló en la puntada final.
El colombiano Duván Zapata y el paraguayo Antonio Sanabria no bastaron hoy para torcer la historia ante una Lazio que presentó al brasileño Felipe Anderson, al danés Gustav Isaksen y al capitán y goleador Ciro Immobile (reemplazado a los 55' por el argentino Valentín Castellanos) como contrapartida, pero llegó al gol con otros protagonistas.
Ivan Provedel fue otro al conjurar algunos de los intentos de un Torino que hasta el primer gol obligó al visitante a replegarse y que volvió a rondar dos veces el gol con Zapata y con una con el croata Nikola Vlasic en el arranque del complemento.
Pero como suele decirse, lo que no se celebra en un arco se sufre en el otro y Lazio no falló y pegó primero con Guendouzi y repitió casi de inmediato con Cataldi, dos estocadas letales que sintió el equipo de Juric, que no pudo reaccionar siquiera en ventaja numérica tras la expulsión de Gila.
Lazio celebró y se acerca a la zona de clasificación a las Copas europeas, pues suma ahora 40 puntos, uno menos que la Roma y a cinco de Bologna y de Atalanta, que se disputan el pasaje a la próxima Champions cabeza a cabeza, aunque el equipo debe un partido (con Inter, que completará el miércoles).
Torino se lamenta porque quedó más lejos ahora con 36 puntos, los mismos que Napoli (que debe un partido pendiente también por la vigésimo primera fecha y lo jugará también el miércoles ante Sassuolo) y al que enfrentará tras jugar con Roma y con Fiorentina (38), otro equipo que pelea por subirse al tren.
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