Milan dio un paso clave en su proyecto de mudanza del Giuseppe Meazza al adquirir terrenos en San Donato que serán destinados a la construcción de un nuevo estadio del club "rossonero".
El lote en cuestión está ubicado en un área conocida como San Francisco, en el municipio milanés de San Donato, que había dado vía libre al proyecto en enero.
La compra de los terrenos está contemplada dentro del presupuesto de 40 millones de euros que el club italiano destinará en la construcción de su nuevo estadio e incluye la documentación necesaria para solicitar la variación urbanística y otros aspectos legales.
El intendente de San Donato, Francesco Squeri, había informado el martes a los concejales sobre la evolución del proyecto, que volverá a ser debatido la próxima semana con las restantes autoridades del sur de Milán que participan del mismo.
La cuestión del nuevo estadio generó hace pocos días una controversia entre Barbara Berlusconi, ex vicepresidenta del Milan e hija del fallecido Silvio Berlusconi, y el alcalde de Milan, Giuseppe Sala.
Según comentó la hija de "Il Cavaliere" a ANSA, la idea avalada por Sala de remodelar el Meazza "es sólo un nueva forma de no hace nada" al respecto.
Berlusconi afirmó que ese proyecto, que contempla la construcción de un cuarto anillo en el tradicional escenario sin necesidad de cerrarlo, resulta más oneroso que construir un nuevo estadio.
Esa obra demandaría una inversión cercana a los 300 millones de euros, cifra que -destacó- resulta "demasiado baja y poco creíble", al comparar que "Real Madrid gastará más de mil millones de euros en la reconstrucción del Santiago Bernabéu, con costos que duplican las previsiones".
Según Berlusconi, el Meazza ya cumplió su ciclo porque "no es funcional, es decadente y no cuenta con los servicios necesarios. Quienes frecuentan la segunda y la tercera bandeja del estadio lo saben muy bien. Tienen butacas estrechas e incómodas y rampas interminables", ilustró.
La noticia de la compra de los terrenos en San Donato por parte del Milan fue considerada hoy como "una derrota del alcalde Sala" por Samuele Piscina, consejero comunal de la ciudad y secretario provincial de la Liga (ex Liga Norte).
"Sala es responsable de que uno de los equipos más laureados del mundo haya decidido huir de la ciudad", agregó.
En la misma línea se expresó el jefe de la Liga en la Comuna, Alessandro Verri, según el cual "Milan perderá una porción de su historia" y afirmó que "esta es una demostración de los daños que Sala y la Junta Comunal le causaron a esta ciudad, gobernada por la centro-izquierda".
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