España buscará seguir haciendo historia en el Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda cuando enfrente el viernes a Países Bajos, finalista de la pasada edición que albergó Francia en 2019 y que también va por más en el torneo.
El partido, que se jugará en el Estadio Regional de Wellington con el arbitraje de la francesa Stéphanie Frappart, pondrá en marcha los cuartos de final que continuarán el viernes también, pero en el Eden Park de Auckland, con el duelo entre Suecia y Japón, único campeón mundial (en Alemania 2011) que sigue en carrera.
De ambos choques surgirán los rivales el martes en Auckland en una de las semifinales del torneo, que conocerá el sábado a los equipos que chocarán en la otra (el miércoles en Sydney).
El sábado, la sorprendente Colombia jugará en el Accor Stadium de Sydney frente a Inglaterra, campeona de la Eurocopa que organizó el año pasado, mientras que la co-anfitriona Australia se medirá frente a Francia en el Suncorp Stadium de Brisbane.
Los cuartos se pondrán en marcha con la España comandada por Jorge Vilda, que en su tercera participación mundialista ya mejoró lo hecho en las dos anteriores, pues se despidió de Canadá 2015 en la fase de grupos y de Francia hace cuatro años en octavos.
En esa última Copa, la selección ibérica fue eliminada tras caer por 2-1 ante Estados Unidos, que luego refrendaría su corona al superar por 2-0 a Países Bajos en la final.
El combinado naranja, que en su primera participación en Canadá 2015 cayó 2-1 en octavos ante Japón, podría volver a enfrentarlo en semifinales si ambos superan el corte.
Las españolas no dejaron dudas en octavos, instancia en la que despacharon por un categórico 5-1 a Suiza, luego de haber avanzado con dos goleadas (3-0 ante Costa Rica y 5-0 frente a Zambia) y una derrota también categórica (4-0 frente a Japón) y como escoltas en el Grupo C.
Países Bajos, que despachó por un más modesto 2-0 a la sorprendente Sudáfrica en octavos, había avanzado como líder del Grupo E con dos victorias (1-0 frente a Portugal y 7-0 ante la debutante Vietnam, tras igualar 1-1 con Estados Unidos, que abdicó a la corona en octavos al caer en dramática definición por penales frente a Suecia tras empatar sin goles en 120 minutos de juego).
"Las estadounidenses hablaron demasiado y por eso celebré su eliminación en el torneo", confesó la neerlandesa Lineth Beerensteyn, delantera de Juventus, en diálogo con la BBC.
"Se la pasaron hablando de la final y de ese tipo de cosas, pero antes de hablar debes lograr la clasificación en la cancha", destacó la atacante.
Con su compatriota Jill Roord, del Manchester City, artillera del plantel con 4 festejos (uno menos que la goleadora japonesa Hinata Miyazawa), Países Bajos intentará doblegar ahora a una España que apostará por Aitana Bonmatí y Alba Redondo, del Barcelona y del Levante, referentes en ataque con tres goles cada una.
"Son un gran equipo y un rival complicado que va a exigir que demos lo mejor", advirtió Vilda en la previa del duelo ante el combinado neerlandés entrenado por Andries Jonker, quien sufrirá la ausencia seguramente de Danielle van de Donk, mediocampista del Olympique Lyon que cumplirá una fecha de suspensión por suma de amarillas.
Inglaterra también perderá a una pieza clave en su plantel el sábado ante Colombia, pues Lauren James, delantera del Chelsea y una de sus principales figuras, recibió dos fechas de suspensión tras su expulsión a los 87' de juego en la victoria por penales frente a Nigeria en octavos de final.
James vio la tarjeta roja por pisar a su colega Michelle Alozie cuando estaba en el piso, gesto que fue advertido por el VAR y obligó a la jueza hondureña Melissa Borjas a expulsarla.
La FIFA confirmó hoy que James (hermana de Reece James, jugador también el Chelsea y de la selección masculina) recibió dos fechas de suspensión y por eso la entrenadora neerlandesa Sarina Wiegman no podrá contar con ella frente a Colombia y, eventualmente, en semifinales frente al vencedor de Australia-Francia.
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