No es el Vesubio, es Napoli, que estrenará mañana frente a Fiorentina su flamante título de campeón de Italia en un Estadio Diego Maradona que lucirá colmado y amenaza con volver a activar los sismógrafos, como sucedió el pasado dominigo en el gol del urguayo Mathías Olivera frente a Salernitana el pasado domingo y con el del nigeriano Victor Osimhen ante Udinese en Friuli, el jueves.
Casi dos kilómetros al noroeste del estadio está instalada una de las estaciones de la red sísmica Ingv (Observatorio Nacional de terremotos), que posee "una sensibilidad muy elevada y alcanza a registrar muchos aspectos de la vida cotidiana como el tránsito", explica uno de sus directivos.
"La planta cuenta con un sistema capaz de distinguir esos ruidos habituales de un terremoto y por eso pudo hacerlo en los goles que se festejaron en Nápoles y en las celebraciones posteriores", explicó en alusión a lo ocurrido en la ciudad tras la consagración del equipo de Luciano Spalletti que cortó 33 años de sequía.
Seguramente mañana también detectarán sonidos por encima de lo habitual cuando Napoli salga a la cancha para enfrentar a Fiorentina ya consagrado como nuevo rey de Italia en un Maradona que agotó hace días sus entradas, lo que anticipa escenas de aficionados circulando alrededor del recinto sin poder ingresar, tal como sucedió hace una semana.
Habrá que ver si el equipo de Spalletti vuelve a cantar victoria en esta ocasión luego de dos empates en fila y si logra mantener la concentración que lo llevó a igualar el récord de Juventus, Inter, Milan y la propia Fiorentina consagrándose con cinco fechas de anticipación.
Poco importará seguramente el resultado razón por la cual el entrenador seguramente rotará a los habituales titulares no sólo para que descansen, sino para que aquellos que participaron menos, pero también aportaron en la conquista del "scudetto", como el argentino Giovanni Simeone, reciban los aplausos que merecen.
Difícilmente uno de esos cuatro o cinco cambios que presentaría la formación de Napoli sea por Osimhen, quien sin dudas buscará incrementar su cosecha de 22 festejos que lo tienen como "capocannoniere" del certamen a falta de otras cuatro jornadas para el final.
Sean quienes fuesen los elegidos, seguramente Napoli buscará estrenar su título de campeón con un triunfo para sumar también a los 25 conseguidos en un torneo en el que sólo sufrió tres derrotas y que lo tiene como el más efectivo tanto en ataque (69 goles) como en defensa (23).
Fiorentina, que no contará con el lesionado brasileño Arthur Cabral, seguramente no querrá ser apenas un invitado en fiesta ajena y sin dudas irá en busca de los tres puntos pues está lejos todavía de la zona, pues con 46 puntos marcha a 12 de distancia de Atalanta y de la Roma, el primero con un partido menos.
El equipo de Vincenzo Italiano sí debe regular energías pues jugará el 11 y el 18 de mayo los partidos de ida y vuelta con Basilea por las semifinales de la Conference League, antes de enfrentar a Inter en el Estadio Olímpico de Roma, el 24 de mayo, por el título de la Copa Italia.
Mañana, además de Cabral, lesionado en un entrenamiento el viernes, Fiorentina no podrá contar con el argentino Lucas Martínez Quarta, suspendido, pero sí con su compatriota Nicolás González, quien posiblemente inicie como suplente, mientras que el brasileño Dodó lo haría como titular.
Son especulaciones, pues Italiano no ofreció la conferencia de prensa habitual en la previa del duelo con un Napoli en el que Simeone, el mexicano Hirving Lozano y el uruguayo Olivera se anuncian también como suplentes, al igual que el brasileño Juan Jesús.
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