"No tenemos noticias ciertas pero el trabajo de las personas que están siguiendo este proceso continúa. La esperanza es que pronto lleguen noticias un poco más reconfortantes", afirmó Lanna en la inauguración del Club Sampdoria "Luca Vialli y Bobby Gol".
Lanna aprovechó la ocasión para agradecer a quienes siguen estando al lado del club, que marcha en el último puesto de la Serie A al cabo de 26 fechas.
"Seguiremos luchando hasta el final, como lo está haciendo el equipo, para encontrar una solución a nuestra querida Sampdoria.
Intentamos seguir en lo que podemos y de verdad agradezco a todos las empresas genovesas que nos están ayudando en esta fase tan difícil, como es el alcalde de Bogliasco (Luca) Pastorino, que entiende el momento", remarcó.
"Gracias a todos los que están a nuestro lado, estamos defendiendo el fuerte con todo lo que podemos", subrayó Lanna en alusión a Pastorino y su respuesta al concejal de la Liga Federico Fossa, quien había pedido explicaciones sobre la deuda de 345 mil euros contraída por Sampdoria hasta el 31 de diciembre de 2022 con el Ayuntamiento de Bogliasco por la concesión del polideportivo Mugnaini, donde se entrena el equipo.
En tanto, Sampdoria busca una solución a la falta de liquidez en las arcas de la empresa, en primera instancia para obtener 35 millones de euros que darían oxígeno para continuar la temporada.
El club considera empeñar las acciones para obtener ese dinero.
En caso de no pagar, Sampdoria pasará a manos de quienes financiaron el bono.
La hipótesis que lleva a Massimo Zanetti, propietario de Segafredo, desde hace un tiempo parece cada vez más recluida a pesar de los contactos realizados hace unas semanas, mientras que Raffaele Mincione, el financiero ya protagonista hace unos años en Génova de Banca Carige, es más operativo.
El principal interés apunta sobre todo para la parte inmobiliaria de la familia Ferrero, mientras que la idea de Sampdoria interesa pero no ilusiona.
La prensa italiana publicó que Sampdoria busca más compañeros de viaje para financiar este bono, pero de momento no hubo muchas incorporaciones.
En este escenario, quien parece tener más ganas de apostar por Sampdoria es el directivo Alessandro Barnaba, propietario del fondo Merlyn Partners que ya en diciembre había puesto 50 millones para la ampliación de capital del club.
Hoy la sensación es que se puede intentar el golpe decisivo en cuanto el perito (abogado Eugenio Bissocoli), designado por la Cámara de Comercio para la composición negociada del estado de crisis, tendrá que lidiar con la falta de sujetos dispuestos a hacer el aumento de capital.
En ese punto se podrán abrir las puertas a una nueva etapa con Bernabé, que evaluará volver para dar continuidad y evitar la quiebra.
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