La directiva de la FFF se reunió para analizar el tema después de días de polémica y decidió destituir a Diacre para evitar profundizar el problema y encontrar un reemplazo a tiempo para preparar adecuadamente el Mundial de Australia y Oceanía previsto desde el 20 de julio.
Diacre, de 48 años, había asumido en 2017 y tenía contrato hasta los Juegos Olímpicos de París 2024, pero había sido criticado por la capitana Wendie Renard y por Marie Antoinette Katoto y Kadidiatou Diani, otras dos líderes del plantel.
Estas tres jugadores cuestionaron los métodos de gestión de la entrenadora y decidieron no responder más a las convocatorias.
La FFF anticipó que "las numerosas audiencias realizadas, la última el pasado martes con la propia Diacre, han permitido evidenciar una ruptura que va en detrimento de los intereses de la selección".
"La FFF reconoce el compromiso y la seriedad de Corinne Diacre y su personal, pero las disfunciones observadas parecen irreversibles y, a la luz de estos elementos, se ha decidido dar por terminado el mandato de Diacre", completa la nota.
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