Bologna convirtio un gol en cada tiempo y derrotó hoy por 2-0 a Spezia en el arranque de la vigésima fecha, resultado que le permitió escalar al octavo puesto en el campeonato italiano.
    La segunda ronda del torneo comenzó con el pie derecho para el "azulgrana" del ítalo-brasileño Thiago Motta, que se impuso con un tanto del austríaco Stefan Posch a los 37' y otro de Riccardo Orsolini a los 77' para llegar a 26 puntos, los mismos que Torino.
    Un triunfo merecido en el que el local dominó de principio a fin, extendió la racha positiva y le permitió ganar confianza de cara a lo que resta del campeonato.
    Victoria que festejaron a lo grande los cerca de 15 mil aficionados que se dieron cita en el Renato Dall'Ara, donde Bologna no ganaba desde antes del receso obligado por el Mundial de Qatar.
    Posch comenzó a sentenciar el pleito en el primer tiempo al capitalizar un tiro de esquina que premió la presión del equipo de Motta, en tanto que Orsolini terminó de liquidarlo en el complemento, cuando Spezia intentó reaccionar para sumar puntos que lo alejasen de la zona de riesgo.
    El esquema planteado por el entrenador para disimular la ausencia del goleador austríaco Marko Arnautovic rindió los frutos esperados, gracias a la gran tarea de Orsolini y al sacrificio desplegado por el neerlandés Joshua Zirkzee.
    Los dirigidos por Luca Gotti, en cambio, sintieron la falta de su mejor delantero: el angoleño M'Bala Nzola, pese a lo cual llegaron con chances de lograr el empate en el final del primer período, pero chocaron con la solvencia del arquero polaco Lukasz Skorupski.
    Más trabajo tuvo su colega y compatriota Bartlomiej Dragowski, una de las figuras de su equipo que comenzó a erigirse como tal cuando el partido se encendió a la media hora de juego con un par de intervenciones frente a Zirkzee y luego ante un cabezazo del escocés Lewis Ferguson.
    El gol llegaría poco después cuando un tiro de esquina encontró a Posch ubicado en el lugar justo en el momento correcto para que el zaguero austríaco conectase el balón a la red.
    Spezia intentó responde con el polaco Arkadiusz Reca, pero apareció en escena su compatriota Skorupski para rechazar el balón y en el rebote el ghanés Emmanuel Gyasi dilapidó la chance de igualar.
    Los cambios ensayados por Gotti para darle energías renovadas a su equipo parecieron darle al visitante el impulso necesario para ir por el empate, pero jugado en ataque se descuidó atrás y de contragolpe Bologna logró estirar la ventaja.
    Uno de ellos, iniciado por el ingresado argentino Nicolás Domínguez, dejó cara a cara con el arquero a Orsolini (a quien poco antes le anularon un gol por posición adelantada) para sentenciar el pleito con un zurdazo inatajable que ingresó a centímetros del travesaño.
    Fue el golpe de gracia que necesitaba para frenar el ímputo de un Spezia que ya no volvió a llegar con riesgo y para asegurar un triunfo necesario que le permite escalar posiciones y esperar con más serenidad el camino que queda por recorrer en el torneo.
    "Ganamos con justicia porque creamos situaciones y no nos convirtieron", resumió un conforme Motta, ex DT de Spezia que se dijo "satistecho con el rendimiento del equipo como lo estaba en el partido con Cremonese, aunque ese no lo ganamos".
    "Creo que vamos por el camino correcto", completó el DT al destacar que "ahora, los muchachos deben descansar porque jugamos tres partidos seguidos muy intensos, para luego preparar el duelo con Fiorentina".
    "Hoy nos faltaron algunos jugadores importantes cuya ausencia se sintió. Interpretamos bien el partido e hicimos lo que podíamos hacer, aunque claro a nadie le gusta perder", reconoció por su parte Fabrizio Lorieri, ayudante de campo de Gotti, en diálogo con la prensa.
    En el otro adelanto de la jornada, la Salernitana de Davide Nicola logró un triunfo clave en la lucha por la permanencia al derrotar por 2-1 al ascendido Lecce en un partido que se resolvió en el primer tiempo.
    El franco-senegalés Boulaye Dia celebró su octavo gol en el torneo a los 5' y el neerlandés Tonny Vilhena decretó el 2-0 parcial a los 20', tres minutos antes de que Gabriel Strefezza descontara para el local para mantenerlo en partido.
    Con el arquero mexicano Guillermo "Memo" Ochoa custodiando la valla (y el chileno Diego Valencia observando desde el banco), Salernitana sostuvo la ventaja y terminó sumando tres puntos de oro que lo dejan con 21, uno por encima de su rival de turno que al mando de Marco Baroni y frente a unos 25 mil espectadores sumó su octava derrota en el torneo y marcha cuatro puestos por encima de la zona de descenso.
    La vigésima fecha continuará el sábado con otros tres partidos: Empoli-Torino, Atalanta-Sampdoria y Cremonese-Inter, en tanto que el domingo se jugarán otros cuatro, entre los que se destaca el que animarán el líder Napoli y Roma en el Diego Maradona y el que jugarán Lazio y Fiorentina en el Olímpico de Roma.
    Milan buscará rehabilitarse ante su público cuando reciba a Sassuolo y Juventus sumar parte de los 15 puntos que le descontaron como sanción por el caso de las plusvalías cuando reciba a Monza, en tanto que Udinese y Hellas Verona le bajarán el telón al vigésimo acto el lunes.
    La segunda ronda del torneo se inició con el estreno del sistema semiautomático para señalar las posiciones adelantadas que hizo su presentación en la Supercopa de Italia que Inter le ganó a Milan en Riad, Arabia Saudita.
    Napoli espera iniciar la segunda mitad del campeonato como terminó la primera, aunque la Roma del portugués José Mourinho se anticipa como un rival complicado para el equipo de Luciano Spalletti (ex DT del giallorosso).
    Cuando chocaron por la primera ronda en el Olímpico, Napoli se impuso por 1-0 sobre el final con gol del nigeriano Viktor Osimhen, artillero del torneo con 13 festejos contra los siete que celebró el argentino Paulo Dybala, la figura de la Roma que tras el receso mundialista cosechó tres victoria y un empate.
    Los de Spalletti sufrieron en ese lapso su primera derrota en el campeonato, pero ganaron sus otros tres partidos y le sacan 13 puntos de ventaja en la tabla a su rival de turno, uno más que al escolta Milan.
   

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