La ceremonia oficial de entrega se llevó a cabo en la Oficina del Fiscal de Manhattan en presencia del Cónsul Cesare Bieller.
Las 42 piezas pertenecientes a Italia fueron identificadas durante las investigaciones realizadas por el Comando de Carabinieri para la Protección del Patrimonio Cultural (Tpc) en colaboración con la oficina del fiscal de Manhattan.
Al evento asistieron el fiscal de distrito de Nueva York, Alvin Bragg, el jefe de investigaciones de seguridad interna, Ivan Arvelo, y el general de carabineros Tpc Vincenzo Molinese.
Entre los bienes robados hay ánforas, pinturas, esculturas y objetos de oro que datan del año 600 AC.
La restitución -sostiene una nota- es una prueba más de la eficacia de la cooperación bilateral en la lucha contra el tráfico ilegal de hallazgos arqueológicos que, solo en el último año y medio, permitió traer de regreso a Italia alrededor de 450 hallazgos.
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