Más Rocco Schiavone que héroes en comisarías

Antonio Manzini, creador Schiavone, publica "Hagan juego"

El escritor italiano Antonio Manzini. autor de Rocco Schiavone.  (foto: ANSA)
El escritor italiano Antonio Manzini. autor de Rocco Schiavone. (foto: ANSA)

(ANSA) - BARCELONA 14 FEB - En las comisarías encontramos "más Schiavone que héroes", dice en entrevista a ANSA el escritor italiano Antonio Manzini sobre el subjefe de policía poco ortodoxo que protagoniza su serie de novelas negras, de la que acaba de publicar en español la última entrega, "Hagan juego".
    El escritor atribuye el éxito del personaje del subjefe de policía Rocco Schiavone, de cuyos libros ha vendido 2 millones de ejemplares en Italia, y de la teleserie basada en ellos al hecho de que "está lleno de defectos porque es humano. Y porque hace un montón de tonterías", apunta.
    Quizás, continúa, "porque en las comisarías de policía encontramos más Schiavone que héroes. Encontramos personas normales que fuman marihuana. Él es una persona que está sola, desesperada, deprimida, cínica, pero con un buen corazón y con arrebatos de generosidad".
    A diferencia de Montalbano, el comisario creado por Andrea Camilleri, Rocco "no es una buena persona, yo no la querría como amigo", dice.
    Manzini (Roma, 1964) fue alumno de Camilleri, de quien habló la pasada semana en una mesa redonda en BCNegra, celebrada en Barcelona: "Era un maestro que te enseñaba sin hacerte ver que te enseñaba".
    De Camilleri "aprendí a no tomarme demasiado en serio. Son solo libros lo que escribo, a no ser que seas como Proust, y yo no lo soy", apunta.
    Aunque se le considere heredero a nivel literario de Camilleri (1925-2019) él no lo siente así porque, entre otras cosas, "no me dejó nada, ni siquiera un libro", bromea.
    Manzini publica ahora la séptima entrega de Schiavone en español (en italiano ya lleva 11), "Hagan juego" (Salamandra), en el que el subjefe de policía se enfrenta a un asesinato en el casino de Saint-Vincent, lo que le lleva al mundo de la ludopatía.
    El escritor considera la ludopatía "un cortocircuito de la moral y de la ética del Estado, porque el Estado gana muchísimo dinero con la ludopatía, que es una verdadera enfermedad, no es un vicio de alguien a quien le gusta jugar. Hay familias enteras que se arruinan y terminan en las manos de la mafia y de la camorra porque tienen que jugar".
    Manzini es muy crítico con los Estados que "no solo lo permiten, sino que lo promueven".
    El escritor lo ha ambientado en el casino de Saint-Vincent, en el Valle d'Aosta, porque "es un lugar sórdido. Desde hace muchos años tiene pérdidas y el Estado lo subvenciona", apunta.
    La trama de la novela se cierra en la siguiente entrega, "Rien ne va plus", que próximamente se publicará en español.
    El Estado "no debería ganar con las enfermedades, como con el tabaco. Debería curar la ludopatía dando posibilidad a la gente que no tiene recursos para ir al médico y curarse de esta dependencia, que es como la del alcohol o la del tabaco", sostiene.
    Manzini está escribiendo el próximo libro de Schiavone, que saldrá en mayo en Italia, sobre la ecología, en el que ha imaginado a un ejército de jóvenes que hacen atentados ecológicos, el primero liberando a 420.000 pollos, salvados de la agricultura intensiva, en la autopista Roma-Milán. (ANSA).