El anuncio lo hizo la alcaldesa de la capital, Claudia López, quien avisó que se trata del primer paso hacia la transición energética y la descarbonización del transporte público.
La administración de la ciudad explicó que se trata de un autobús para 50 pasajeros, ensamblado en el país, que cuenta con una autonomía superior a los 450 kilómetros con una recarga diaria, alcanza una velocidad máxima de 90 kilómetros por hora y en el tiempo que dure la prueba se estima que se reducirá en 1.083 toneladas las emisiones de CO2.
Bogotá es una ciudad pionera en el tema medioambiental y de transporte. En la actualidad posee la flota de autobuses eléctricos más grande después de China con 1.485 vehículos de este tipo.
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