(ANSA) - BUENOS AIRES 8 MAY - La huelga general que vivirá
Argentina el 9 de mayo, convocada por la Confederación General
del Trabajo (CGT), la mayor central sindical del país, es la
segunda durante el gobierno del ultraliberal Javier Milei,
contra sus políticas de ajuste.
El paro contará con la adhesión del sector del transporte,
después de que el gremio expresase su respaldo en las últimas
horas.
Desde las 00.00 horas (03.00 GMT) del jueves 9 de mayo y
hasta la medianoche (03.00 GMT del viernes), la Unión
Tranviarios Automotor (UTA), que agrupa a los representantes del
transporte colectivo (autobuses especialmente), se sumará al
paro general, según confirmó en un comunicado.
"Como consecuencia de las medidas del Gobierno Nacional
tomadas directamente en contra del Pueblo trabajador, y
abiertamente orientadas a vulnerar derechos individuales
básicos, la UTA se suma al reclamo de toda la sociedad, y se
adhiere a la medida dispuesta por la CGT para el próximo 9 de
mayo", explicó el texto difundido en sus redes sociales.
Esta adhesión supone un importante cambio respecto de la
primera huelga general contra el gobierno, también convocada por
la CGT, el pasado 24 de enero, cuando se garantizó el
transporte urbano durante toda la jornada hasta las 19.00 horas
(22.00 GMT) para favorecer la movilización de los ciudadanos.
El paro y su alcance será una pulseada entre el gobierno y
el sindicalismo con el objetivo de, no solo visibilizar su
rechazo al plan de ajuste que está llevando adelante el
libertario, sino también usarla como un elemento de presión
sobre el Senado para que no apruebe la controvertida Ley Bases
que promueve el Gobierno
Especialmente, sobre los legisladores peronistas y
kirchneristas, con quienes tienen mayor afinidad ideológica,
pero quienes también responden a los intereses de sus
gobernadores necesitados de recursos.
El proyecto oficial que obtuvo media sanción en la Cámara
baja y comenzó a ser discutida esta semana en el Senado, incluye
una reforma laboral que resiste el sindicalismo. ya que cercena
los derechos de los trabajadores.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, volvió a arremeter
hoy contra la CGT por el paro general que realizará mañana y
tildó a la central obrera como "los fundamentalistas del
atraso".
"En cuatro meses dos paros de la CGT, dos de Educación, más
de cientos de marchas. Mañana paran los fundamentalistas del
atraso. A quienes piensan extorsionar a los argentinos, les
informamos que solo se van a ganar el odio de los argentinos",
sostuvo el funcionario nacional.
En su conferencia de prensa diaria en Casa Rosada, el
portavoz consideró que la medida de fuerza de la central obrera
"no tiene una justificación aparente" y remarcó que "está
habilitada la línea 134 para denunciar extorsiones" para adherir
a la protesta.
Además, ratificó que "a los trabajadores estatales que paren
se les descuenta el día".
Esta nueva medida de fuerza tendrá lugar a 150 días de la
asunción presidencial de Milei. Será la segunda llamada a una
huelga general de la CGT durante el mandato del libertario, si
bien diferentes gremios y organizaciones civiles han mantenido
la actividad en las calles en protesta por las políticas de
ajuste del gobierno.
El primer paro general contra Milei había sido el 24 de
enero, a tan sólo 44 días de haber llegado a la Casa Rosada,
cuando miles de personas tomaron las calles de Buenos Aires y
de otros puntos de Argentina para decirle "no" al
desmantelamiento del Estado impulsado por el mandatario. Es día,
sindicatos, organizaciones sociales, políticos de la oposición y
diversos grupos autoconvocados se manifestaron en contra de los
proyectos con los que el presidente argentino pretende arrogarse
facultades legislativas especiales y desregular la castigada
economía argentina. (ANSA).