(ANSA) - ROMA, 07 MAG - El maratonista keniata Eliud
Kipchoge, campeón olímpico en esa disciplina en los Juegos de
Río 2016 y en Tokio 2021, se mostró sorprendido y asustado por
las amenazas recibidas por parte de usuarios de las redes
sociales después de haber sido vinculado con la muerte de su
compatriota y colega Kelvin Kiptum, fallecido el 11 de febrero a
los 24 años de edad como consecuencia de un accidente de
tránsito.
"Estoy realmente conmovido al leer que algunos me vinculan con
su muerte", afirmó Kipchoge, de 39 años y campeón mundial en los
5 mil metros en París en 2003, al aludir al quienes le atribuyen
alguna responsabilidad en el deceso de Kiptum, poseedor del
récord mundial en la maratón, por considerar que él formó parte
de una supuesta conspiración para asesinarlo
En diálogo con BBC Sport Africa, Kipchoge destacó que debido a
esa falsa acusación es víctima de "amenazas de todo tipo" y dijo
que por ese motivo se siente aterrorizado no tanto por él, sino
por su familia: "Tengo terror realmente de que mis hijos vayan a
la escuela y no regresen. Ni siquiera pueden salir a andar en
bicicleta porque no sabemos qué podría sucederles", explicó.
Kipchoge destacó también que al daño que sufren sus hijos por
esta situación se agrega el daño psicológico: "Es difícil para
ellos escuchar decir: Tu padre asesinó a una persona".
A diferencia de las precauciones que debió adoptar para intentar
garantizar la seguridad y la integridad de su familia, el atleta
afirmó que en lo personal no tomó precauciones de ningún tipo:
"No veo por qué debería cambiar mi lugar habitual de
entrenamientos".
"Vivo al sol porque mi deporte no se practica en un gimnasio. Se
trata de salir a correr", explicó al afirmar: "Camino libremente
por las calles", aún cuando reconoció que la situación que
atraviesa le generó problemas a nivel deportivo y también
personal.
"Desde que me vincularon con el accidente de Kiptum y tras los
insultos y amenazas que recibí en las redes sociales, perdí a
casi el 90 por ciento de mis amigos. Es doloroso saber que
algunas acusaciones fueron efectuadas por gente de mi entorno,
por compañeros de entrenamiento", relató.
En lo que hace a su carrera profesional, Kipchoge consideró que
el caso influyó en sus actuaciones, como lo reflejó su décimo
puesto en la Maratón que se celebró en Tokio el 3 de marzo y que
representó su peor perfomance desde que debutó en esta
disciplina en 2013.
"Cuando estaba en Tokio, no logré dormir durante tres días",
explicó el atleta, que fue incluido en el equipo olímpico
keniata que participará en los Juegos de París este año, en los
que intentará cosechar pese a todo la tercera medalla de oro
consecutiva porque -confesó- "quiero ser el primero en lograrlo
para quedar en los libros de historia".
Kiptum, cuyo fallecimiento fue considerado una tragedia
nacional, murió al estrellarse el vehículo que conducía contra
un árbol tras caer en una zanja de 60 metros en la carretera
B-54 entre Eldoret y Kaptagat la noche del 11 de febrero.
Junto con él viajaba su entrenador el ruandés Gervais
Hakizimana, quien falleció pocos minutos después del accidente
en el que la otra ocupante del vehículo logró salvar su vida.
Por tratarse de un atleta keniata emergente que podía amenazar
el reinado de Kipchoge, algunos especularon con la posibilidad
de que este último estuviese involucrado con esa tragedia, que
él mismo consideró como "la peor noticia que recibí en mi vida".
Sobre la pesadilla que debió atravesar como consecuencia de esas
acusaciones, Kipchoge destacó que las amenazas fueron desde
"quemar mi campo de entrenamiento, hasta mi casa y a mi familia"
y que su propia madre padeció por esa situación.
"Mi madre es una persona mayor, pero incluso ella se enteró de
lo que sucedía por las redes sociales", afirmó, al destacar
también que fue ella quien "me dio la fuerza y el valor para
seguir adelante" en los momentos en los que se sentía realmente
deprimido.
El maratonista apuntó a la responsabilidad de las empresas que
manejan las redes sociales al afirmar que "no hicieron gran cosa
al respecto" para castigar los abusos en las plataformas de
"aquellos que desde el anonimato acusan sin razón y son personas
realmente peligrosas. Deberían actuar más rápido y eliminar esas
cuentas".
"Lo que me sucedió me llevó a no confiar en nadie, ni siquiera
en mi propia sombra", resumió al augurar que la iniciativa
impulsada por el Comité Olímpico Internacional (COI), de apelar
a la inteligencia artificial para identificar a quienes cometen
abusos en las redes sociales, sirva para proteger a los atletas
para que ninguno tenga que pasar por la situación que a él le
tocó vivir. (ANSA).